Consejos para no sufrir por el cambio de horario

Para entender el horario de verano primero debemos tomar en cuenta que cada año se realiza el primer domingo de abril y termina el último domingo de octubre. De tal manera que este año comenzará el próximo domingo 2 de abril y finalizará el 29 de octubre.

Oficialmente, este cambio se realiza a las 2 de la mañana, para que al despertar puedas realizar tus actividades, sin contratiempos, de acuerdo con el nuevo horario.

Este cambio es vigente en toda la república mexicana, excepto aquellos municipios que colindan con la frontera norte, los cuales aplicaron el cambio de horario el pasado 12 de marzo.

Este cambio de horario afecta sobretodo a niños, mayores de 50 años y personas con demencia, que según el neurólogo Francisco Valenzuela, pueden tardar en adaptarse al nuevo horario entre siete y diez días, mientras que los adolescentes y adultos sanos de menos de 50 tardan dos o tres días en asumir el cambio.

Para todos ellos, los especialistas disponen de consejos fáciles para reducir los efectos del cambio de rutina. Si sigues estas directrices no vas ni a notar el cambio de hora.

Madruga el domingo

La consecuencia más habitual del cambio de horario es la dificultad por conciliar el sueño. Para ello, los expertos en el tema recomiendan despertarse pronto el domingo. De esta manera, cuando llegue el momento de irte a la cama de nuevo, tardarás menos en coger el sueño.

Hora de desayunar: Dieta rica en vitamina C y triptófano

El desayuno es la comida más importante del día y en una jornada tan ‘especial’ como esta es crucial alimentarse bien. Los especialistas aconsejan que bases tu dieta en alimentos ricos en vitamina C, como fruta y zumo de naranja, así como productos que contengan triptófano, ya que aumentan los niveles de serotonina y melatonina.

Nada de siestas y, sino, muy cortas

Hacer siestas de hora y media nunca ha sido bueno para nuestro organismo pero este sábado aún lo son menos. Si lo que quieres es echarte un rato después de comer, evita que la siesta pase de los treinta minutos. Hacerlo desfasaría tus horarios.

¿Trabajas de noche?

Para los que trabajan de noche, el adelanto de hora se nota mucho más. Es importante que en la medida de lo posible se expongan a la mayor cantidad de luz para simular la luz del día así como utilizar gafas de sol al salir de trabajar para que simular que es de noche.

Cena a la misma hora de siempre.

Después de cenar ligero y a tu horario habitual, hay que procurar irse a dormir temprano. Es importante que esperes un par de horas entre la cena y el momento de irte a dormir y que no cambies tu horario de comidas, ya que nuestro organismo puede notar la diferencia.

No retrasar la hora de golpe

Los expertos también recomiendan que, en vez de cambiar la hora entera, repartamos el cambio en cuatro jornadas, es decir, 15 minutos cada día.