Trump y Bannon, su asesor belicoso: tambores de guerra y problemas de agenda

Trump y Bannon, su asesor belicoso: tambores de guerra y problemas de agenda

 

*Autoritarismo, frentes abiertos y nepotismo; la guerra, ¿energía social?

*Crisis financiera de 2008, fraguó populismo Trump; riesgos mexicanos

*Un ciclo en Radio Fórmula; algo qué decir, Brecht y mi agradecimiento      

ALGUNAS veces nos ocupamos de arreglar las ventanas mientras la casa se bien abajo. Enrique Krauze advirtió que con Donald Trump en la presidencia de Estados Unidos nuestro país estaría al borde de una guerra. Parecía una exageración. El vecino del norte tiene más de 236 mil puestos de trabajo en la industria armamentista. Más de 43 mil millones de dólares como impacto económico total.

En casi tres meses de gobierno, Trump no las tiene todas consigo. En el Congreso estadounidense no logró derogar el Obama Care, programa de salud aprobado por su antecesor. Trump quiere cambiar un programa nacional de salud, pero no dice hacia dónde; equivaldría a dar la espalda a 40 millones de derechohabientes que acceden por primera vez a servicios de salud con cobertura amplia. Un logro de Obama, vivito y coleando.

Otro frente problemático para Trump ha sido la posible intervención de Rusia en la elección presidencial que lo catapultó a la Casa Blanca. Hay una investigación desde el Congreso; si se prueba que mintió en audiencia oficial tendrá graves consecuencias. El perjurio amerita cese inmediato. Ya hubo dos funcionarios renunciados por contactos clandestinos con el gobierno ruso.     

Así, son ligeros los señalamientos de nepotismo a Trump, al dar chamba a dos hijos y su esposa. Bastó con que anunciara que sus familiares trabajarán sin goce de sueldo; lo permite la legislación. Las formas autoritarias de Trump chocan con la prensa estadounidense liberal.

La agenda más peligrosa es la guerra. Está en la mente de Stephen Bannon, estratega en jefe de Trump, de quien hablamos en otra entrega.

TAMBORES DE GUERRA

BANNON leyó el libro “El cuarto turno: una profecía Americana sobre los círculos de su historia”, de William Strauss y Neil Howe. De ahí surgió un documental de Bannon, Generación Cero (2010), donde se expone la teoría determinista de la historia estadunidense, cuyo eje es la guerra. Vale la pena una cita larga para observar el inquietante pensamiento de Bannon: “Estados Unidos ha pasado por cuatro grandes momentos fundacionales marcados por una gran guerra: la revolución americana (siglo XVIII), la guerra civil (Siglo XIX), la Primera y Segunda Guerra Mundial en el siglo XX. Después de cada guerra, le toca a la generación que sufrió las penurias del conflicto refundar el orden político, económico y social. Esta generación alcanza grandes logros por su temple moral. Conforme pasa el tiempo, las generaciones posteriores, que no combatieron ni refundaron, pierden el rumbo y entran en decadencia, desencadenando la siguiente guerra y posterior momento fundacional”. Dice: la energía social de EEUU depende de la guerra.

Bannon explica que los baby boomers (la generación gringa de fin de siglo, que gobernó Bill Clinton) abandonaron la economía de guerra. El festival de rock en Woodstock (1969), es clave para la retirada gringa de Vietnam: “los hijos de la prosperidad y la estabilidad encontraron el hedonismo y decidieron sacar a Dios de su mundo, situándose a sí mismos en el centro de sus propias vidas”. Por eso, con los hippies que terminaron como yuppies, se arruinó la energía social y cultural de Estados Unidos. En la visión de Bannon, una nueva gran guerra es inevitable para recobrar energías. Y no sólo eso: “es necesaria para refundar el orden social”.

EN EL CENTRO DEL DESASTRE  

TIENE Bannon otra motivación más pecunaria: la errática conducción económica de las élites, sean liberales o conservadoras. En eso no anda tan errado: “Le di la espalda a Wall Street por la misma razón que todos los que lo hicieron: el contribuyente americano fue forzado a llegar a tratos estúpidos para financiar a unos tipos que no lo merecían”. Trump, su jefe, quien se benefició de ese crack financiero.

Primero demócrata y luego republicano, Bannon se dirigió a la bandera independiente: “Lo que hizo que me rebelara contra todo el establishment fue regresar de administrar compañías en Asia en 2008 y ver que Bush nos había jodido igual de mal que Carter a fines de los setentas. El país entero era un desastre. Y se los digo: la base de esta revuelta populista es la crisis financiera de 2008”. Ahí encontró a Trump, aunque primero tejió una red de periodismo conservador online: Breitbar News. Ahora despachan en la Casa Blanca, tienen el poder. Es ahí donde la agenda EEUU-México es peligrosa. Bannon y Trump, populistas de la guerra, pueden mirar hacia el sur con ojos belicosos. La debilidad institucional de México es tentadora. China y El Islam, las otras opciones, son más lejanas y caras.

MÁS DE UNA DÉCADA

SE CIERRA un ciclo. Decía el dramaturgo y activista alemán Bertold Brecht que “una persona que tienen algo qué decir y no encuentra oyentes está en una mala situación. Pero todavía están peor los oyentes que no encuentran quien tenga algo qué decir”. Es una divisa para el trabajo.

Desde que la escuché por primera vez en Radio Educación, como rúbrica del cierre de transmisiones, me pareció que era una excelente hoja de ruta. Más convencido ahora que hay tantos distractores y que la industria de la cultura provoca y se alimenta del déficit de atención. Nada queda, todo es efímero.

Por eso quiero agradecer a quienes durante más de diez años me han acompañado en Radio Fórmula Tabasco, en mis tres comentarios en al día de lunes a viernes, 15 a la semana, 60 al mes, 720 al año; más de siete mil en una década. 

Una muy satisfactoria experiencia que concluyó la semana pasada. Agradezco el apoyo. Busqué atender temas distintos y diversos a los que ocupan mi columna diaria en Presente. Hice buenos amigos y excelentes radioescuchas; no hay mejor relación que aquella en la que se atiende y entiende, aunque se opine distinto.

Fue en el 2003-2004 cuando recibí la amable invitación para realizar un recuento y una breve opinión diaria en Radio Acir, en la nueva etapa del noticiario de Juan Carlos Huerta desde la redacción de diario Presente. Vino después mi traslado a Radio Fórmula, primero con un comentario al medio día, para luego contar con tres breves espacios a las 8:00, 13:45 y 20:00 horas. Antes, allá por 1986, había comenzado con una recopilación semanal de opiniones en Radio Tabasco (El Tema de la Semana).

 (vmsamano@yahoo.com.mx)