Alimentos orgánicos: Qué son, y cómo son

Resaltó que tenemos que leer y documentarnos, para no comprar productos producidos por una máquina que sólo daña nuestro organismo, “hay que llegar al supermercado pero sólo por lo indispensable”.

GPM: ¿Qué es un producto orgánico?

VPR.-Es el que se cosecha de manera natural por un campesino y que no tiene insumos externos. Lo que le pone el campesino a su tierra es lo que tienen a la mano el estiércol de vaca y otros desechos de animales.

Nosotros en nuestro lenguaje a lo que produce el campesino le decimos comida, a lo que produce una maquina le llamamos biomasa porque no tiene ninguna una calidad.

GPM: ¿Cuál es la diferencia entre un producto orgánico y natural?

VPR.-Un producto orgánico debe de tener una certificación que cuesta aproximadamente medio millón de pesos, pero es muy difícil que un campesino la pueda obtener. A través de la certificación se evalúan los procesos de producción que constata que efectivamente el producto está libre de algún químico o fertilizante.

Un producto natural puede en dado caso tener la presencia de algún químico, por ejemplo cuando se compran pollitos de granja en la veterinaria, ya no es orgánico, pero se crían en las casas de manera natural con maíz o con tortillas.

GPM: ¿Hay certificación en México de productos orgánicos?

VPR.-Desde hace un par de años en México, ya hay una certificación orgánica participativa que es un poco difícil de obtener y se hace a través de ciertas universidades por ejemplo la de Chapingo tienen ese servicio.

GPM: ¿Los productos orgánicos son caros?

VPR.-Hay gente que ha encontrado negocio, ya que muchas personas con el fan de cuidar su salud los adquieren porque el mismo doctor les dice que no pueden estar comiendo embutidos, ni dada con conservadores, y muchos  recurren a su pollo criollo. Y También sea vuelto caro porque hay poca producción de productos orgánicos.

GPM: ¿De qué forma puede ser más barato consumirlos?

VPR.-Sí, claro que se puede convertir en algo muy barato, si la gente siembra sus hortalizas y a partir de ahí cosechar tomate, chile, cilantro, berenjena, cebollín, lechuga, y una infinidad  de productos. Esto ya es una necesidad irreversible, porque después de la Revolución Industrial se empezaron a propagar todas las enfermedades que hoy conocemos, nuestro país es el primer lugar en obesidad y en diabetes.

GPM: ¿Qué tenemos que hacer para adoptar este modelo de producción?

VPR.-Tenemos que regresar a la agricultura de nuestros abuelos, ellos esperaban la luna o alguna estación del año para sembrar. Toda esa sabiduría ancestral, desafortunadamente en las escuelas de agricultura se desechó.

Ahorita ya empezó la agroecología, que retoma los saberes de la agronomía pero también  todo el saber ancestral, que en su momento tuvieron los Aztecas y los Mayas, quienes tenían avanzados sistemas de producción.

La tecnología quiere forzar a la naturaleza, lo cual es un error gravísimo y una de las crisis de la modernidad.

GPM: ¿Dónde adquirir los productos orgánicos?

VPR.-Hay muchos lugares donde se pueden comprar, aquí en la capital hay por lo menos cinco establecimientos en plazas comerciales,  pero hay que ser cuidadosos, y leer las etiquetas.

El internet es maravilloso, ahí podemos investigar y entrar a las páginas de los proveedores  y cerciorarnos que es orgánico, ya que hay  gente que no tiene escrúpulos y que vende cualquier producto como orgánico. 

A pesar de que no hay una regla para saber si un producto es orgánico o no debemos de ser cuidadosos a la hora de adquirirlo.

GPM: Finalmente ¿Qué tienen que hacer los productores locales?

VPR.- Cambiar la conversión de sus ranchos, algunos ya se dieron cuenta, no sólo por el consumidor, si no que por el uso de tantos químicos sus tierras se dañan y se erosionan quedando infértiles y tienen que pasar varios años para que puedan volver a producir.

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