Los secretos detrás de la técnica de stop motion en la película Frankelda

"FRANKELDA": LOS SECRETOS DEL STOP MOTION

La primera película mexicana en formato stop motion, dirigida por Arturo y Roy Ambriz, llega a las salas de cine respaldada por Guillermo del Toro. Aquí te presentamos una serie de detalles sobre su fascinante proceso creativo.

• El personaje original, Francisca Imelda, tras varios intentos fallidos por publicar sus historias, decide abreviar su nombre y se convierte en Frankelda.

EL ORIGEN DE FRANKELDA

Todo comenzó antes de la pandemia, cuando Cartoon Network contactó a Arturo y Roy Ambriz, con quienes ya había trabajado en cortometrajes de stop motion basados en series como Hora de aventuras y Tío Grandpa.

La cadena les preguntó si tenían algún proyecto de terror, y fue así como los hermanos imaginaron a Frankelda, una escritora de historias de miedo, lo que dio pie a una serie.

Cuatro años después, la historia de Frankelda llega a las salas de cine mexicanas bajo el título Yo soy Frankelda y luego se proyectará en Centroamérica.

GUILLERMO DEL TORO: EL "GANDALF" DEL SET

Guillermo del Toro ha sido una presencia constante en el proyecto, guiando a los realizadores y asegurándose de que avanzaran paso a paso. "Le decimos que es como nuestro Gandalf de El Señor de los Anillos," comenta Roy.

LA MAGIA DEL STOP MOTION

El stop motion es una técnica de animación en la que los objetos se mueven milimétricamente y se fotografían en cada desplazamiento. Para darle vida a un segundo de acción, se requieren 24 tomas, y este largometraje contó con más de 150,000 fotos.

• Más de 100 personajes

La película cuenta con más de cien personajes, cada uno creado a mano. No basta con diseñarlos en papel; la fabricación de cada uno es un proceso tan complejo que muchas veces cambia por completo la idea inicial.

Frankelda, la protagonista de detalles

Frankelda es un personaje que requiere mucha precisión. Su mandíbula es movible, y se crearon 60 tipos diferentes de boca y más de 10 cejas para permitir diversas expresiones. Además, se fabricaron varios pares de manos, ya que cada par se utilizaba en una sola toma.

DE MANUFACTURA FANTASMAGÓRICA

Cada personaje requiere aproximadamente dos meses de trabajo y la colaboración de 30 personas. Frankelda, por ejemplo, tiene un esqueleto de aluminio, foam latex para las piernas y limadura de hierro en los ojos para mover sus pupilas. Cada uno de sus rizos tiene alambre en su interior.

Para simular que Frankelda y su compañero Herneval, el personaje alado, "vuelan", se les fijaron a brazos metálicos para evitar que se movieran más de lo necesario. Estos brazos luego se eliminaron digitalmente.

Para evitar retrasos durante la filmación, se crearon seis versiones de Frankelda. Sin embargo, para el resto de los personajes, solo se hizo una copia. Si alguna figura se dañaba, se reparaba durante la noche para no interrumpir el trabajo.

SETS DE LOCURA

La película contó con más de veinte sets construidos especialmente para la producción. Algunos, como el de una cueva, llegaron a medir 20 metros cuadrados, donde se recrearon escenas con criaturas míticas como un grifo bicéfalo de seis metros y un hada voladora de solo 10 centímetros.

Financiada por los propios creadores

El 80% del presupuesto del filme fue financiado por los hermanos Ambriz. Su inversión personal fue considerable, y esperan que la película sea un éxito, lo que les permitirá continuar creando historias en stop motion.

UNA VISIÓN ARTÍSTICA EN TIEMPOS DE IA

Yo soy Frankelda ofrece una visión única en un momento en que la inteligencia artificial está ganando terreno en la industria del cine, destacándose como una obra artesanal llena de alma y dedicación.