Ventajas y desventajas de ser tutor

La posibilidad de dictar las clases desde tu hogar de forma virtual, es una ventaja enorme en estos tiempos. Te permite transformarte en un profesor y ganar un poco de dinero extra

Todos, absolutamente todos, tenemos algo para dar, tal vez ese conocimiento que tú crees insignificante, para otra persona sea clave y lo esté esperando; sin ir más lejos, si empiezas a investigar, encontrarás cursos y tutores que dan clases y capacitación de cosas que ni te imaginas.

Ventajas y desventajas de ser tutor

Y lo mismo sucede con los alumnos. Hoy son muchas las personas que destinan parte de su tiempo en capacitarse y formarse en temáticas de todos los tipos. Desde cursos sobre costura y origami, hasta clases de apoyo de alguna asignatura de la universidad que no logran pasar. El abanico de opciones cada día es más amplio y variado.

¿Qué ganarás siendo tutor virtual?

Como te hemos contado, convertirte hoy en un tutor virtual es más fácil. No necesitas dejar tu trabajo oficial, la virtualidad te permite ahorrarte mucho tiempo de transporte. No necesitas moverte hasta el lugar de encuentro, si tienes tu laptop contigo, estés donde estés podrás llevar adelante el encuentro con tu alumno. Pero no es la única facilidad que la virtualidad trajo consigo.

Trabajar desde un ordenador te facilitará muchísimo el acceso a la información. Si estás dando una clase o una tutoría y no recuerdas un concepto, o no sabes cómo resolver una pregunta que te plantee el alumno, podrás recurrir a los buscadores en internet, al fin y al cabo, Google todo lo sabe ¿no? Además, los contenidos siempre se mantienen al alcance y actualizados.  

Compartir actividades y generar nuevas propuestas, es mucho más fácil con internet de por medio. Sin contar de que siempre tienes la posibilidad de sumarte a foros y conectar con personas que estén en la misma situación que tú. Compartirán información, experiencias y recomendaciones con la cuales podrás seguir creciendo y desarrollándote.

Y ni hablar de la eliminación de las barreras geográficas. Podrás tener alumnos de todo el mundo, sin el impedimento de tener que encontrarse en el mismo espacio físico. Además, con un poco de suerte, puede que termines conectando con personas muy diferentes a ti y hasta de otras culturas, algo que dará la posibilidad de crecer a nivel personal.

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¿Qué necesitas saber?

Aunque no todo es color de rosa, por supuesto que habrá complicaciones. Adaptarse a cosas nuevas no siempre es sencillo. Pero, tranquilo, es sólo cuestión de tiempo. Ahora, toma nota de algunas cosas que debes tener en cuenta si te interesa esta propuesta de trabajo independiente.

Ser tutor virtual te demandará algo de tiempo de planificación y diagramación de las clases. Está claro que no es lo mismo explicarle algo a un alumno cara a cara, tendrás que estudiar investigar estrategias para poder lograr su comprensión total y que la experiencia sea útil para él o ella.

Deberás mantenerte al tanto de las actualizaciones tecnológicas. Buscar la mejor plataforma para llevar adelante los encuentros, analizar donde será mejor cargar los documentos que necesitas compartirle, etc. El correcto uso de estas herramientas será una pata clave para tus clases.

Mantener la concentración del alumno por el tiempo que dure la reunión virtual, puede que te cueste un tanto más que de forma presencial. Piensa que ambos estarán en contextos diferentes. Estudiar en casa o en cualquier otro lugar que no sea un aula, hará que la atención se disperse y que le cueste seguir el hilo de lo que intentas enseñarle.

Finalmente, debes ser consciente de que necesitarás tener a la tecnología a tu favor. Tal vez, hacer una buena inversión en una laptop y contar con un buen servidor de internet, sean buenas ideas. Cualquier fallo en la conexión, hará que la clase se corte abruptamente, y que, por más que consigas restablecer el problema, la dinámica se interrumpa.

Son problemas que no puedes prever. El control del entorno y de estas herramientas, es imposible en esta modalidad. Pero tienes que anticiparte y tratar de hacer todo lo posible para intentar evitarlas, o tener un plan B listo ante cualquier eventualidad.

Anímate A pesar de estad dificultades, podemos asegurarte que el esfuerzo valdrá la pena. Empieza a investigar sobre cómo hacer para convertirte en un tutor particular virtual. Sólo tienes que animarte a dar la primera clase y tener tu primer alumno, el resto se irán acomodando solos.

Al principio tendrás muchos errores, eso puedes darlo por hecho. Pero, con el tiempo, verás cómo cada vez todo se da más natural y más fácilmente. ¿Qué esperas? Anímate y conviértete en un tutor virtual.



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