Uno de los consejos más comunes para evitar hacer compras por antojo en el supermercado es no ir con hambre. Haber comido algo antes de salir es ideal, porque así no estaremos dispuestos a llenar el carrito de toda la comida que nos gustaría comer en ese momento.
Pero además de eso, ¿sabías que con el paso del tiempo los supermercados han hecho sus "carritos" más y más grandes? Esta es una estrategia que hace que los consumidores compren más cosas, puesto que sienten una necesidad de llenar el carrito. Algunos incluso están inclinados pensar que un carrito vacío se ve muy triste.
Por lo tanto, si no quieres comprar muchas cosas, toma una canasta en lugar de un carrito. O si necesitas incluso menos de lo que cabe en una canasta y podrías cargar tu compra en tus manos, no tomes un carrito o lleva tu propia bolsa.
Otro consejo es que te fijes también en los estantes superiores e inferiores. Las tiendas suelen colocar los productos más caros o los que más quieren vender en la parte central de las estanterías; a la altura de los ojos. Como ahí es a donde solemos voltear a ver instintivamente, ignoramos que puede haber productos más baratos en los otros estantes.
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