- La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) alertó que la asistencia humanitaria destinada a la Franja de Gaza continúa siendo inadecuada, pese a las pausas tácticas anunciadas por Israel en respuesta a la presión internacional.
Aunque estas pausas han sido aprovechadas por la ONU y organizaciones aliadas para intentar asistir a la población, las restricciones operativas y de seguridad, así como una compleja burocracia, impiden un acceso efectivo.
Según la OCHA, los convoyes requieren múltiples permisos israelíes, rutas seguras y la apertura de pasos clave como el de Kerem Shalom, lo que retrasa y limita gravemente la entrega de ayuda.
- La agencia remarcó que la magnitud de la crisis humanitaria supera con creces, lo que se ha podido entregar hasta ahora. Con más de dos millones de personas atrapadas en un entorno devastado, la entrada de camiones de ayuda es mínima, el combustible escasea, y los hospitales, plantas de agua y vehículos humanitarios enfrentan dificultades operativas.
Incluso tras cuatro días de estas pausas, se siguen reportando muertes por desnutrición y hambre, así como entre personas que intentan acceder a la ayuda.
La ONU también expresó su preocupación por la falta de seguridad, tanto para la población civil como para los trabajadores humanitarios.
- Las agencias internacionales reiteraron su demanda urgente de abrir todos los cruces fronterizos y establecer un acceso seguro, amplio y continuo para el ingreso de alimentos, medicinas y otros insumos vitales, con el fin de evitar una catástrofe alimentaria de gran escala.
Por su parte, el gobierno israelí ha respondido a las críticas asegurando que sí está facilitando la entrega de ayuda humanitaria.
En un comunicado emitido por su embajada en México, Israel afirmó que ha establecido pausas diarias, corredores seguros y apoyo logístico para permitir el ingreso de agua, comida y combustible, destacando además el trabajo de ONG como la Fundación de Defensa Humanitaria para Gaza.
Las autoridades israelíes sostienen que Hamás interfiere en la distribución de los suministros y acusa a ciertos medios de tergiversar la información. Como ejemplo, mencionan que algunos casos de niños reportados como víctimas del hambre en realidad padecían enfermedades preexistentes, según han señalado medios como The New York Times y La Repubblica.