Con fuerza, técnica y resiliencia, la lucha libre femenil en México ha conquistado espacios que durante décadas les fueron negados. Hoy, las gladiadoras mexicanas no solo suben al cuadrilátero: lo encabezan.
- Lluvia, referente del Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL) e hija del legendario Sangre Chicana, recuerda cómo al inicio de su carrera —en 2008— apenas eran programadas y sufrían comentarios machistas tanto de compañeros como de aficionados.
Pese a las barreras, la campeona mundial de parejas del CMLL reconoce que la evolución ha sido posible gracias al apoyo de la afición y a las pioneras de la lucha femenil: "Gracias a las que picaron piedra, hoy estamos aquí. Nos toca seguir luchando, dentro y fuera del ring".