El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán en PyeongChang, Corea del Norte, ha asegurado que en esta edición se batirá un curioso récord que nada tiene que ver con el deporte.
El organismo ha anunciado que se distribuirán 110.000 preservativos en la villa olímpica, rompiendo el récord de las ediciones de 2010 y 2014 en las que se repartieron 100.000.
La cifra es ligeramente superior a la de hace cuatro años y supone que cada deportista recibirá 37 condones. Eso sí, el comité de los Juegos se ha apresurado a aclarar que esta medida busca prevenir la propagación del virus VIH, y no promocionar la actividad sexual dentro de la villa olímpica. “No se espera que los atletas los usen todos”, aseguró Chung Geun-Sik, portavoz del organismo.
Los 110.000 preservativos, donados principalmente por Convenience, una compañía local de Corea del Sur, son la cuarta parte de los que se repartieron en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Allí se distribuyeron un total de 450.000 condones entre los atletas, periodistas y demás miembros de las delegaciones desplazadas.
La distribución de preservativos en la villa olímpica se hizo por primera vez durante los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988. Allí se repartieron un total de 8.500 condones. La cifra desde entonces ha aumentado, también en los Juegos de Invierno, en los que se siguen batiendo récords.