El actor y comediante David Spade, conocido por su participación en las películas de Adam Sandler, relató recientemente una experiencia que calificó de "aterradora" luego de ser seguido por un grupo de individuos que se hacían pasar por fanáticos en Los Ángeles.
UN ACOSO QUE LLEGÓ A SU HOGAREn el pódcast Fly On The Wall, Spade explicó que tras un evento público, un grupo de personas lo siguió hasta su residencia. Se trataba de revendedores de autógrafos, quienes buscan firmar objetos para venderlos con fines de lucro.
Contó el actor. Al negarse, la situación se tornó tensa, ya que estos individuos se acercaron demasiado e incluso mostraron un comportamiento agresivo.
El momento más angustiante para Spade fue darse cuenta de que lo habían seguido hasta su propia casa, lo que lo llevó a considerar medidas de defensa:
El actor subrayó que aunque este tipo de acoso ocurre con frecuencia, que lo siguieran hasta su domicilio fue mucho más allá de lo habitual y lo hizo sentir realmente en peligro.
REVENDEDORES DE AUTÓGRAFOS: UN NEGOCIO RIESGOSO
Los revendedores de autógrafos coleccionan firmas de celebridades con el único fin de lucrar, sin considerar el espacio personal ni la seguridad de los artistas. Este caso evidencia los riesgos que enfrentan figuras públicas, quienes a menudo lidian con límites difusos entre admiradores y acosadores.
LA FAMA Y SUS PELIGROS
El incidente de Spade no es aislado. Muchas celebridades han sufrido acoso o amenazas por parte de fanáticos obsesionados:
- Brad Pitt: Su casa en Los Ángeles fue asaltada mientras promocionaba una película, evidenciando la vulnerabilidad de las residencias de famosos.
- Taylor Swift: Ha tenido varios enfrentamientos con acosadores que intentaron irrumpir en su propiedad, obligándola a solicitar órdenes de restricción.
- Sandra Bullock: En 2014, un intruso entró a su casa en plena noche; la actriz se refugió y llamó a la policía, logrando su arresto.
Estos casos reflejan el lado oscuro de la fama, donde el acoso, la intimidación y los robos representan un riesgo constante para quienes están en el ojo público.