El mundo del espectáculo atraviesa días de luto tras la muerte de tres figuras muy queridas. En apenas una semana, los fallecimientos de Conrado Osorio, Fernando Meza y Eduardo Manzano reavivaron la llamada "regla de 3", una creencia popular que sostiene que las muertes de celebridades suelen ocurrir en grupos de tres.
La cercanía de las fechas y la relevancia de estos artistas en distintas generaciones provocaron una oleada de reacciones en redes sociales, donde colegas, productores y seguidores compartieron mensajes de despedida y homenajes espontáneos.
Aunque no tiene sustento científico, esta idea se refuerza cada vez que se acumulan pérdidas en periodos cortos. Especialistas en cultura popular explican que el público establece vínculos emocionales con las figuras del espectáculo, por lo que la repetición de noticias trágicas en pocos días amplifica el impacto colectivo.
En esta ocasión, tres trayectorias muy distintas coincidieron en una misma semana, alimentando la conversación en medios y redes sobre esta creencia tan arraigada.
Las muertes que marcaron la semana- Conrado Osorio: falleció el 27 de noviembre a los 49 años, víctima de complicaciones por cáncer de colon. Nacido en Colombia, desarrolló gran parte de su carrera en México con participaciones en Clase 406, La fea más bella, La reina del sur y El cartel de los sapos.
- Fernando Meza: murió el 2 de diciembre. Actor de doblaje y cofundador de Huevocartoon, dio voz a personajes icónicos como Huevos Rancheros y Tlacua, además de participar en películas animadas como Una película de huevos y Un gallo con muchos huevos.
- Eduardo Manzano: su deceso se confirmó el 5 de diciembre, a los 87 años. Reconocido comediante e integrante de Los Polivoces, dejó un legado en cine, televisión y comedia, con trabajos en Una familia de diez, Como dice el dicho y La rosa de Guadalupe.
Más allá de la creencia popular, la partida de estas tres figuras recuerda el legado que dejan los artistas a través de sus personajes, su voz y su presencia en la historia del entretenimiento mexicano. Tres caminos distintos, unidos por el mismo sentimiento de despedida en una semana que quedará grabada en la memoria colectiva.