El Chapo Guzmán sin duda enfrenta el peor momento de su vida en Supermax, la cárcel de máxima seguridad en Colorado, pues de acuerdo con su abogado Marc Fernich, el exlíder del Cártel de Sinaloa, quien fue sentenciado a cadena perpetua más 30 años, se encuentra muy “triste”, incluso asegurando que “está muy distinto”, lo cual su estado emocional les preocupa.
Fernich y la abogada Mariel Colón señalaron que en una visita a la prisión, también conocida como el Alcatraz de las Rocosas, se dieron cuenta de cómo estaba El Chapo.
“Me di cuenta de que estaba triste. Completamente diferente. Su comportamiento, sus ojos”, contó Fernich a la revista New York. “Incluso su cabello, le afeitaron la cabeza. No importa si ha sido condenado por los crímenes más atroces o crímenes horribles, no creo que nadie merezca ser tratado de esa manera”.
Guzmán Loera le pide a sus abogados que trabajen en la apelación a su favor, por lo que sus abogados lo han visitado y cuentan que simplemente El Chapo “no se está adaptando a la vida en el Supermax en Colorado”, en donde sí tiene permitido tener tiempo para hacer ejercicio al aire libre, pero en una zona restringida, sin embargo las visitas son cada vez más restringidas.
En Manhattan, “El Chapo” era visitado a diario por Mirón, así como por otros asistentes legales de la defensa, a fin de “pasar tiempo” con él y monitorear sus condiciones carcelarias, pero ahora Guzmán Loera no tiene las mismas visitas, y menos la de su familia, por lo que sus abogados consideran que El Chapo ya no es el mismo de antes y sin duda la está pasando muy mal.