Los 'perrhijos' y el nuevo modelo de familia que se afianza

Consultas aumentan 50 por ciento, estiman veterinarios; alertan que humanización de estos seres los vuelve neuróticos, depresivos y con exacerbada competencia territorial

Arturo Sánchez Mejorada, presidente de la Federación de Colegios y Asociaciones de Médico Veterinarios Zootecnistas de México, indicó que como consecuencia de la pandemia y del aislamiento los mexicanos adoptaron o adquirieron un mayor número de animales de compañía y ello originó el aumento de hasta 50 por ciento de consultas a especialistas.

En particular, dijo que son las mujeres más jóvenes quienes forman parte de una nueva cultura pet friendly que incrementó el mercado de cuidado y atención, lo que implica también que se destine mayor presupuesto a cuidados, compra de accesorios, belleza y servicios.

Aunque también comentó que se requiere que se verifique la certificación de quienes ofrecen esos servicios para mantener el bienestar de las mascotas.

A propósito del festejo del Día de las Madres, el especialista Manuel González Oscoy considera que México enfrenta además una evolución de los Dinks (double income, no kids: doble sueldo no niños) a los PANKS (personas con y sin hijos) con mascotas.

Mantener la salud de estos seres sintientes implica la atención de un especialista veterinario de una a tres veces al mes, algunos requieren alguna terapia que bien puede ser musical o psicológica, independientemente del esquema de vacunación.

En ese bienestar es habitual contratar alguna persona para su entrenamiento, que puede ser de hasta mil 200 pesos por sesión, más la compra de accesorios o juguetes para el mismo propósito.

En la parte de cuidados, la industria ha desarrollado una serie de alternativas que van desde cangureras y bolsas de dormir, desde 200 pesos hasta cinco mil pesos, las carriolas o transportadoras pueden implicar inversiones de hasta 13 mil pesos por una pet bike tráiler o coches plegables de lujo de cinco mil 400 pesos.

A ello se le agregan una serie de utensilios para el cuidado, el baño, corte de uñas y limpieza y el sistema de protección que brindan los seguros, que, dependiendo del tamaño de la mascota, la raza, el color y hasta el nombre, incrementan el costo anual a 15 mil pesos por año.