Un mantel donde la cantante Yrma Lydya hizo algunas anotaciones antes de ser asesinada por su esposo en el restaurante Santory de la Ciudad de México ya forma parte de la carpeta de investigación sobre el delito cometido la semana pasada.
Palabras como 'el inicio, 'diabetes', 'deshonesto' y 'problemas de sangre', fueron escritas entre garabatos y otros rayones. Este objeto, en manos de las autoridades, servirá cómo prueba para entender en qué contexto fue privada de la vida la cantante.
Por otro lado, la grafóloga Maryfer Centeno hizo un análisis para De Primera Mano de lo escrito en el papel y estas fueron las conclusiones.
En una fotografía que se difundió donde Yma Lydya posa a lado de Hernández Alcocer se puede observar a ambos con una postura de orgullo, de acuerdo con la especialista.
"Los vemos orgullosos uno del otro, presumiéndose. Como si ella fuera un objeto digno de presumir y ella fuera de alguna forma también".
La posicion de ambos y los gestos con los que aparecen en la fotografía revelan el orgullo de ambos sobre la imagen pública que daban.
En cuanto a las palabras plasmadas en el papel, Centeno mencionó que sí pueden pertenecer a Yrma Lydya debido a que corresponden a un cerebro femenino por los trazos curvos y menos ángulos.
"La palabra 'deshonesto' la vemos que está hasta movida y torcida y después se pierde totalmente lo que se trata de decir y se convierte en una escritura totalmente angulosa y temblorosa. Se sentía acorralada, se sentía temerosa".
El tipo de letra que tenía Lydya la describen como una persona educada, organizada, que se fija en los pequeños detalles y con gran poder de convencimiento y manipulación.
En lo que avanza el escrito en el mantel se va perdiendo la capacidad, reflejando desesperación y angustia, falta de ideas y cansancio emocional.
"El hecho de que haya escrito todo en la parte derecha de la hoja nos habla de una persona que amaba vivir y que pensaba a largo plazo y que tenía la intención de sobresalir".
Señala también que otros garabatos que aparecen en el mantel podrían ser de otra persona, presuntamente masculina, señala la grafóloga.
"Yo podría pensar que esta escritura corresponde a un hombre y la otra corresponde a una mujer. En estos garabatos a una persona obsesiva, a una persona violenta, a una persona enojada, estresada e impulsiva".
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