Una alternativa viable para la atención de la problemática derivada de los arribazones de sargazo al Caribe, es el impulso a las biorrefinerías, ya que, con ello se podría aprovechar el sargazo para la obtención de productos con valor agregado, entre ellos, el biogás y el bioetanol, útiles para la producción de energía.
Así lo dio a conocer el Dr. Raúl Tapia Tussell, director de la Unidad de Energía Renovable del Centro de Investigación Científica de Yucatán A. C. , quien explicó que el concepto de biorrefinería busca la obtención del mayor número de productos de valor en una línea de proceso a partir de un solo sustrato.
Por su parte la estudiante de doctorado en Energía Renovable del CICY, M. C. Karla Azcorra May, indicó que en esta serie de procesos (biorrefinería) además de la obtención de productos útiles para la producción de bioenergía.
También deriva en la obtención de bioproductos como los alginatos y fucoidanos, compuestos muy valiosos en la industria de la cosmética y la salud.
Con esta investigación, la M. C. Karla Azcorra May, ganó el Premio a la Juventud 2022, en la modalidad estudiante de doctorado, entregado por la Global Bioenergy Partnership (GBEP).
Asociación integrante de la Food and Agriculture Organization of the United Nations (FAO) que tiene como fin impulsar la transformación del uso de la biomasa hacia prácticas más eficientes y sostenible.