El Puente de la Concordia, ubicado en la alcaldía Iztapalapa, vuelve a ser foco de atención ciudadana tras la difusión de imágenes que evidencian baches y daños estructurales en su carpeta asfáltica.
A lo largo de los años, esta infraestructura ha enfrentado problemas recurrentes como deslaves, inundaciones durante lluvias intensas y desgaste por el uso diario.
La situación se agravó tras la explosión de una pipa de gas LP ocurrida el pasado 10 de septiembre, que dejó al menos ocho personas fallecidas y más de 90 lesionadas.
Aunque las autoridades atribuyeron el accidente al exceso de velocidad, usuarios en redes sociales señalaron la presencia de un bache en la zona como posible factor contribuyente.
- En respuesta, la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México desplegó un operativo especial para atender la emergencia, que incluyó limpieza, retiro de escombros y mantenimiento de la carpeta asfáltica. Sin embargo, no se precisó oficialmente si se taparon baches, lo que ha generado debate público sobre la transparencia en las labores de reparación.
El Puente de la Concordia es una vía estratégica que conecta Calzada Ignacio Zaragoza con zonas densamente pobladas de Iztapalapa. Su deterioro representa un riesgo para miles de usuarios diarios, especialmente en temporada de lluvias, cuando se han reportado inundaciones y hundimientos parciales.
Vecinos y colectivos urbanos han solicitado una revisión integral de la estructura, así como un plan de mantenimiento preventivo que evite futuras tragedias. La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México continúa con la investigación del accidente, mientras se espera un informe técnico sobre las condiciones del puente.