A partir del 1 de julio de 2026, los bancos mexicanos exigirán identificación oficial para depósitos, retiros y transferencias en efectivo iguales o superiores a 140 mil pesos, como parte de nuevas medidas contra el lavado de dinero.
La Asociación de Bancos de México (ABM) anunció un conjunto de prácticas autorregulatorias que buscan reforzar la prevención del lavado de dinero (PLD) y el combate al financiamiento ilícito. Estas medidas no fueron impuestas por ninguna autoridad, sino que fueron acordadas internamente por el sector bancario.
A partir de julio de 2026, los bancos deberán:
- Solicitar identificación oficial a cualquier persona física que realice depósitos, retiros o transferencias en efectivo por montos iguales o superiores a 140 mil pesos.
- Aplicar controles biométricos para verificar la identidad del usuario.
- Limitar transferencias internacionales a operaciones entre cuentahabientes registrados, para garantizar trazabilidad.
- Fortalecer la supervisión de personas morales, con medidas adicionales de verificación.
Estas medidas surgen tras casos recientes que evidenciaron vulnerabilidades en el sistema financiero, como los escándalos en CIBanco e Intercam, que motivaron una revisión profunda de los protocolos internos.
Además, buscan cerrar la brecha regulatoria entre México y Estados Unidos, alineando estándares para facilitar la cooperación internacional y proteger la integridad del sistema bancario.
Aunque algunos usuarios podrían enfrentar mayores requisitos operativos, la ABM asegura que estas acciones son necesarias para blindar al sistema financiero y proteger a los clientes. Expertos en cumplimiento normativo han señalado que estas medidas podrían mejorar la reputación internacional de México en materia de prevención de delitos financieros.