- Por tonelada de maíz para respaldar a productores mexicanos.
Grupo Minsa, la segunda empresa más importante en la elaboración de harina de maíz en el país, anunció que está pagando alrededor de 1,000 pesos adicionales por cada tonelada de maíz nacional en comparación con el precio internacional, como una medida para fortalecer la producción interna.
Este monto representa aproximadamente 24% más que el costo del maíz amarillo importado utilizado por otras industrias, señaló la compañía a través de un comunicado difundido en la Bolsa Mexicana de Valores.
La empresa —presidida por Altagracia Gómez Sierra— explicó que esta decisión responde al contexto actual, en el que los productores nacionales enfrentan precios internacionales a la baja y un tipo de cambio apreciado.
También aclaró que su consumo de maíz representa solo el 1% del total en el país, por lo que no influye en la creación del precio del grano.
Minsa destacó que por más de tres décadas ha privilegiado la compra de maíz mexicano y sólo recurre a importaciones cuando existe escasez regional. En los últimos seis años, ha adquirido cuatro millones de toneladas de producción nacional, mientras que las compras externas han sido de apenas 69,815 toneladas —menos del 4% del total.
La compañía aseguró que mantiene su compromiso con el desarrollo del maíz blanco en México y que trabaja con productores de estados como Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Sinaloa y Campeche mediante acuerdos directos de comercialización.
Asimismo, señaló que el precio de la harina sólo define el 35% del valor final de la tortilla, ya que el resto depende de otros factores fuera de su control.
La firma participa en las mesas de trabajo para la creación del Sistema Mexicano de Ordenamiento de Mercado y Comercialización de Maíz, junto con productores, la Canami, la industria almidonera y el sector tortillero, con la intención de construir una estrategia duradera que atienda la crisis actual del campo.
Sobre sus ingresos, detalló que el sector de masa y tortilla representa el 51% de sus ganancias; tostadas y botanas el 34%, y el comercio con abarrotes, autoservicios y exportaciones el 11%.
También informó que, aunque compite en licitaciones para vender harina empaquetada a gobiernos, sus ventas al sector público han bajado de 7.8% en 2020 a 4.2% en 2025.
PROTESTAS Y APOYOS ECONÓMICOSEl pronunciamiento de Minsa llega en medio de manifestaciones y bloqueos realizados por agricultores que exigen mejores precios, seguridad y abasto de agua. Para atender estas demandas, el gobierno ha establecido mesas de negociación y acordado un apoyo directo de 800 pesos por tonelada, dirigido especialmente a pequeños productores.
El secretario de Agricultura, Julio Berdegué Sacristán, señaló que este subsidio ayudó a elevar el precio del maíz, que pasó de aproximadamente 4,200 pesos por tonelada a más de 6,000.
Y que se complementa con otros 150 pesos por tonelada aportados por gobiernos estatales. Con esto, los productores reciben entre 25% y 30% más de lo que obtendrían sin apoyos.
Berdegué también mencionó que, tras dialogar con la industria harinera —incluyendo Gruma y Minsa—, el precio ofrecido a los agricultores subió de 94 a 105 dólares por tonelada, permitiendo que el grano se venda por encima de los costos de producción.