El médico Miguel Garibay Solorio propone que el gobierno federal impulse una intensa campaña para convocar a todas las personas que fueron infectadas por el COVID-19 y que no presentaron síntomas, no sólo para que donen plasma sino para que colaboren con el sistema de salud en el cuidado de los enfermos (con un pago de por medio, por supuesto).
Garibay Solorio, pionero en el desarrollo y asistencia técnica para la porcicultura en una extensa región de Michoacán, afirma que de acuerdo a su experiencia en el combate de epidemias, las personas que dieron positivo pero que no tuvieron necesidad de hospitalización serían seleccionadas y no sólo no enfermarán sino que generarán un suero de gran calidad, un suero hiperinmune.
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“Hay mucha gente que se infectó, no presentó síntomas, que se recuperó y tiene anticuerpos, pero que no aparece en los registros de salud. Ellos pueden donar plasma, pueden trabajar en los hospitales con los enfermos y ellos mismos se harán hiperinmunes”, señala.
También insiste en que “el suero que generen estas personas será de gran utilidad para el control de la enfermedad a tiempo, a control la enfermedad a tiempo. Por mi experiencia hacer esto con enfermos más avanzados puede ser demasiado tarde”.