La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió disminuir en 25 puntos base la Tasa de Interés Interbancaria a un día, ubicándola en 7.50%, con efectos a partir del 26 de septiembre de 2025, como parte de su estrategia para mantener la estabilidad de precios y responder a las condiciones económicas actuales.
La decisión fue tomada por mayoría y se inscribe en un ciclo de relajación monetaria iniciado en 2024, cuando la tasa alcanzó su máximo histórico de 11.25%. Desde entonces, Banxico ha recortado 375 puntos base, en línea con la desaceleración económica y la moderación inflacionaria.
En su comunicado oficial, Banxico explicó que el ajuste responde a la valoración del entorno inflacionario, el comportamiento del tipo de cambio, la debilidad de la actividad económica y los posibles impactos de cambios en políticas comerciales globales.
- Inflación general: Se ubicó en 3.74% en la primera quincena de septiembre, por debajo de lo previsto.
- Inflación subyacente: Alcanzó 4.26%, aún por encima del objetivo del banco central.
- Pronóstico de inflación: Se espera que la inflación general converja al 3% en el tercer trimestre de 20262.
Banxico ajustó sus expectativas para el cierre de 2025: la inflación general bajó de 3.7% a 3.6%, mientras que la subyacente subió de 3.7% a 4.0%, reflejando presiones persistentes en algunos componentes.
Expertos como Gabriela Siller, directora de análisis económico en Grupo Base, señalaron que el recorte sitúa la tasa real ex-ante en 3.70%, apenas por encima del rango considerado neutral (1.8%–3.6%). Esto implica que la política monetaria no estimula ni restringe la economía, pero advierten que los riesgos inflacionarios aún están sesgados al alza.
Grupo Base recomendó cautela: "La Junta de Gobierno debería considerar hacer una pausa en el ciclo de recortes de la tasa de interés", ante la persistencia de la inflación subyacente y la incertidumbre global.
Banxico también tomó en cuenta el entorno externo:
- La Reserva Federal de EE.UU. redujo su tasa de referencia en 25 puntos base y anticipa nuevos recortes.
- El dólar se ha depreciado moderadamente.
- Las tasas de interés gubernamentales en EE.UU. han disminuido, especialmente las de corto plazo.
- Además, los cambios de política económica en la nueva administración estadounidense han añadido incertidumbre a las previsiones, con posibles presiones inflacionarias en ambos lados de la frontera.
- La reducción de la tasa de interés puede traducirse en:
- Créditos más accesibles para hogares y empresas.
- Menores pagos en tarjetas de crédito, préstamos personales e hipotecas.
- Estímulo moderado al consumo y la inversión, aunque limitado por la cautela monetaria.