PATRONO DE LOS EDUCADORES
San Juan Bautista de La Salle (1651-1719) fue un sacerdote, teólogo y pedagogo francés cuya vida estuvo marcada por su compromiso con la educación de niños y jóvenes, especialmente aquellos en situación de pobreza. Su legado sigue vigente en la pedagogía moderna y en instituciones educativas de todo el mundo.
Nació en Reims, Francia, en una familia acomodada de juristas. Desde temprana edad mostró una inclinación hacia la vida religiosa, recibiendo la tonsura a los 11 años.
A los 15 años fue nombrado canónigo de la Catedral de Reims, lo que le permitió profundizar en sus estudios teológicos. Sin embargo, tras la muerte de sus padres, asumió la responsabilidad de administrar los bienes familiares mientras continuaba su formación sacerdotal.
En 1678 fue ordenado sacerdote y dos años después obtuvo el título de doctor en teología. Su vida dio un giro cuando conoció a Adrián Nyel, un laico comprometido con la educación de niños pobres. Juntos fundaron escuelas de caridad en Reims, lo que llevó a La Salle a involucrarse profundamente en la enseñanza.
- En 1682, La Salle fundó el Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, una congregación religiosa dedicada exclusivamente a la educación. A diferencia de otras órdenes religiosas, los miembros de su instituto no eran sacerdotes, sino maestros laicos comprometidos con la enseñanza cristiana. Esta decisión fue revolucionaria en su época, ya que rompía con la tradición de que la educación estuviera en manos del clero.
Uno de sus mayores aportes fue la creación de una escuela para la formación de maestros en 1685, considerada la primera escuela normal o de magisterio. Su enfoque pedagógico promovía la enseñanza en lengua materna en lugar de latín, la agrupación de alumnos por edades y la implicación de las familias en el proceso educativo.
INNOVACIONES PEDAGÓGICAS
La Salle introdujo métodos educativos que transformaron la enseñanza:
- Educación gratuita para niños pobres, eliminando barreras económicas.
- Enseñanza en lengua materna, facilitando la comprensión y el aprendizaje.
- Agrupación de alumnos por niveles, en lugar de clases individuales.
- Formación de maestros, asegurando una educación de calidad.
- Uso de la disciplina basada en el respeto, evitando castigos físicos.
Sus escritos, como la Guía de las Escuelas y Reglas de Urbanidad y Cortesía para uso de las Escuelas Cristianas, fueron fundamentales en la educación cristiana y se difundieron ampliamente.
San Juan Bautista de La Salle falleció en 1719 en Ruán, Francia. Fue beatificado en 1888 y canonizado en 1900 por el Papa León XIII. En 1950, el Papa Pío XII lo proclamó patrono universal de los educadores.
Hoy en día, su legado sigue vivo en las escuelas La Salle, presentes en más de 80 países, promoviendo una educación basada en valores cristianos, inclusión y excelencia académica.
San Juan Bautista de La Salle no solo transformó la educación, sino que dejó una huella imborrable en la historia pedagógica. Su visión sigue inspirando a educadores y estudiantes en todo el mundo.