- El exgobernador de Puebla Mario Marín Torres fue reintegrado al penal de Almoloya de Juárez después de que un tribunal federal revocara la prisión domiciliaria que le había concedido en agosto pasado.
Los magistrados determinaron que existía riesgo de fuga y consideraron la gravedad de los cargos por tortura en contra de la periodista Lydia Cacho, caso que data de 2005 cuando Marín fue acusado de participar en la persecución contra Cacho tras la publicación de su investigación sobre redes de explotación infantil.
Conocido como "el Góber Precioso", Marín Torres había permanecido menos de siete meses bajo arresto domiciliario antes de que la justicia ordenara su regreso al centro penitenciario.
El exgobernador había obtenido el beneficio de prisión domiciliaria el 14 de agosto en su residencia de Xilotzingo, Puebla, tras cumplir más de tres años en el penal de máxima seguridad de Almoloya. Bajo esta medida, llevaba un brazalete electrónico y estaba bajo vigilancia constante.
Las acusaciones en su contra señalan que en 2005 habría ordenado la detención arbitraria y tortura de la periodista Cacho, como represalia por su investigación que vinculaba al empresario Kamel Nacif —cercano al entonces mandatario— con una red de pederastia.
El entonces presidente López Obrador criticó duramente la decisión judicial, calificando como "sabadazo" la concesión de prisión domiciliaria para Marín, considerando la seriedad de los cargos en su contra.
No obstante, la FGR —a través de su fiscalía especializada en derechos humanos— impugnó la medida y finalmente logró que fuera revocada, obligando al exgobernador a regresar a prisión.