Hay países "sentenciados a muerte" si sube nivel de mar, advierte ONU

El Consejo de Seguridad tiene un papel fundamental a la hora de conseguir apoyo para las medidas contra el cambio climático, sostuvo Guterres

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, advirtió que el nivel del mar se incrementará significativamente incluso si el calentamiento global se limita "milagrosamente" a 1.5 grados Celsius.

Advierten sobre el calentamiento

Además, afirmó que la Tierra probablemente se encamina hacia un calentamiento que supone "una sentencia de muerte" para los países vulnerables a ese aumento.

Cada fracción de grado cuenta, ya que el incremento del nivel del mar podría duplicarse si las temperaturas suben 2 °C, y aumentar exponencialmente con mayores aumentos de temperatura, afirmó Guterres.

El secretario general habló en la apertura de una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el aumento del nivel del mar en la que intervinieron 75 países, y dijo que el Consejo de Seguridad tiene un papel fundamental a la hora de conseguir apoyo para las medidas contra el cambio climático.


En cualquier escenario, países como Bangladesh, China, India y los Países Bajos están en peligro, y habrá repercusiones graves en grandes ciudades de todos los continentes, como El Cairo, Lagos, Maputo, Bangkok, Daca, Yakarta, Mumbai, Shanghái, Copenhague, Londres, Los Ángeles, Nueva York, Buenos Aires y Santiago, añadió.

La Organización Meteorológica Mundial (OMM) publicó el martes unas cifras, que Guterres citó, según las cuales el nivel promedio del mar a nivel global aumentará entre dos y tres metros en los próximos dos mil años si el calentamiento se limita a 1.5 °C.


Con un aumento de 2 °C, los mares podrían elevarse hasta seis metros, y con un aumento de 5 °C, podrían incrementarse hasta 22 metros, según la OMM.

Guterres afirmó que el peligro es especialmente grave para los casi 900 millones de personas que viven en zonas costeras de poca altura, es decir, uno de cada 10 habitantes del planeta.

    Las consecuencias serán impensables, dijo Guterres. Las comunidades bajas y países enteros podrían desaparecer, el mundo sería testigo de un éxodo masivo de poblaciones enteras a escala bíblica, y la competencia por el agua dulce, tierra y otros recursos sería cada vez más feroz.