De acuerdo con datos emitidos por la Oficina Federal de Estadística (Destatis), Alemania registró una tasa de inflación de 5.3% en diciembre del 2021, la más alta desde 1993. Debido a esto, los precios al consumidor incrementaron en un 3.1% interanual, aseguró Destatis el pasado 6 de enero del 2022. En la eurozona, la tasa de inflación alcanzó el 5%, cifra que tomó por sorpresa al Banco Central Europeo, el cual esperaba que fuera del 2%.
En el 2020, la inflación alemana logró mantenerse en 0.5%, dígito que se vio rebasado gracias a una serie de factores en juego dentro de la economía del país. Debido a la crisis en las cadenas de suministro, las cual representa un problema para múltiples naciones alrededor del globo, los precios de productos en Alemania se han visto gravemente afectados. Aunado a esto, se declaró el fin de la rebaja temporal del Impuesto al Valor Agregado (IVA), medida implementada para abaratar los recibos eléctricos de la nación. Esto con la intención de frenar las repercusiones económicas causadas por la actual crisis sanitaria por Covid-19. Otro factor adicional es la incorporación del impuesto al CO2 para las empresas dedicadas a la explotación de combustibles fósiles, razón por la cual ha subido el costo de los productos petrolíferos.
Asimismo, Alemania se encuentra en un momento crítico en lo que a los contagios por la variante ómicron respecta, batiendo récords casi diario. Por esta razón, el repunte económico que estaba teniendo el país europeo se vio afectado debido al endurecimiento de restricciones dirigido a moderar las transmisiones de coronavirus. Sin embargo, el gobierno alemán hasta ahora ha evitado la paralización del mercado, fenómeno el cual afectó a la nación en el 2020.
Por ahora, se ha detenido el crecimiento económico de la industria alemana, ya que la cuarta oleada de la pandemia y la variante ómicron devolverán la actividad industrial del país a la hibernación, asegura Carsten Brzeski. El economista de ING cree que cuando llegue la primavera del 2022, la industria alemana comenzará su recuperación de forma totalmente sostenible.
Incluso cuando por el momento, diversos países a nivel mundial sufren desbalances económicos gracias a múltiples causas, los pronósticos no son tan desfavorables. Los economistas opinan, en su mayoría, que es necesario algo de tiempo antes de que la tasa de inflación vuelva a sus niveles ordinarios. De igual manera, afirman, para el 2022, el promedio probablemente este una vez más por encima del 3%.