Guangzhou, capital de la provincia de Cantón, concentra miles de fábricas que dependen de las exportaciones a EE. UU. Solo en el distrito de Panyu hay más de 7.200 empresas de confección y 27.000 dedicadas a la venta de prendas, según cifras oficiales.
Sin embargo, muchas de estas empresas han detenido temporalmente sus negocios con el mercado estadounidense, en espera de cómo evolucione el conflicto. Como resultado, han registrado una caída de entre 10% y 15% en sus ventas, una cifra similar a la reducción del 14% de las exportaciones chinas a EE. UU. en general.
- La guerra comercial ha puesto en jaque no solo a grandes industrias, sino también a pequeños empresarios, trabajadores y proveedores de la región, generando incertidumbre económica en una de las zonas más dinámicas de China.