Asteroide que se aproxima a la Tierra, ¿es peligroso?

Diversos medios han alertado sobre un asteroide potencialmente peligroso que, según la NASA, se aproxima a la Tierra; pero, ¿qué tanto peligro corremos?

En días recientes, diversos medios han reportado —a veces, con cierto alarmismo— que el próximo martes 28 de agosto, el asteroide 2016 NF23, con un tamaño similar al de la gran pirámide de Giza y calificado por la NASA como 'potencialmente peligroso', pasará cerca de la Tierra.

La pregunta obligada es: los habitantes de la Tierra, ¿corremos algún riesgo por la aproximación de este 'peligroso' objeto astronómico? Veamos lo que tiene que decir la ciencia al respecto.

Según el portal space.com, en efecto, el asteroide existe y se aproxima a una gran velocidad en dirección de la Tierra. Y sí: el Laboratorio de Propulsión a Reacción (JPL) de la NASA lo considera un NEO —siglas en inglés de objeto próximo a la Tierra—, lo que significa que ha sido atrapado por la atracción del Sol o los planetas del Sistema Solar, en una órbita que podría hacerlo penetrar en las cercanías de la Tierra.

Además, el JPL confirma que tiene un diámetro de entre 70 y 160 metros, y como la gran pirámide tiene una altura aproximada de 140 metros, también es cierto que ambos cuerpos tienen un volumen aproximado. Pero hasta ahí termina la verdad científica y empieza el alarmismo.


Lindley Johnson, oficial de Defensa Planetaria de la NASA, aseguró a space.com que no hay nada de qué preocuparnos por el paso del 2016 NF23, pues este objeto se designa como 'asteroide potencialmente peligroso' porque su órbita se acerca a menos de 8 millones de kilómetros de la órbita de la Tierra, "pero no hay nada peligroso para la Tierra ni nada extraordinario acerca del paso de este asteroide".

Así que aunque medios afirmen que el asteroide pasará 'peligrosamente cerca de la Tierra', la realidad es que a las 10:38 de la noche —hora del centro de México— del 28 de agosto, el 2016 NF23 alcanzará su punto más cercano a la Tierra, que será de 13.2 distancias lunares: alrededor de cinco millones de kilómetros. Nadie diría que eso es 'muy cerca'.

Así, aunque un asteroide masivo hecho de roca viajando a más de 32 mil kilómetros por hora en dirección hacia la órbita de la Tierra puede sonar atemorizante, lo cierto es que otros objetos similares, o incluso más grandes, con frecuencia pasan más cerca de nosotros, sin que siquiera nos percatemos de ello y sin que corramos riesgo alguno.