El gobierno de Estados Unidos, encabezado por el presidente Donald Trump, anunció sanciones contra tres organizaciones palestinas de derechos humanos que colaboraron con la Corte Penal Internacional (CPI) en la investigación de presuntos crímenes de guerra cometidos por Israel en Gaza y Cisjordania.
La medida ha sido calificada por las entidades afectadas como "draconiana, inmoral e ilegal".
Las entidades incluidas en la lista del Departamento del Tesoro son:
- Al-Haq, con sede en Ramala.
- Al Mezan Center for Human Rights, con sede en Gaza.
- Centro Palestino para los Derechos Humanos, también en Gaza.
Estas organizaciones han documentado desde noviembre de 2023 presuntas violaciones al derecho internacional humanitario, incluyendo bombardeos a zonas civiles densamente pobladas, bloqueos humanitarios y desplazamientos forzados.
Su trabajo fue clave en la presentación de pruebas ante la CPI, que derivaron en órdenes de arresto contra el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el exministro de Defensa Yoav Gallant.
El secretario de Estado, Marco Rubio, justificó las sanciones alegando:
Las sanciones podrían implicar el congelamiento de fondos, restricciones financieras y prohibiciones para recibir apoyo económico desde territorio estadounidense.
Las organizaciones sancionadas emitieron un comunicado conjunto en el que condenan "enérgicamente" la decisión, calificándola como un intento de silenciar la documentación de crímenes en medio de lo que describen como "un genocidio en curso contra el pueblo palestino".
La medida se produce días después de que la Asociación Internacional de Estudios sobre Genocidio aprobara una resolución afirmando que Israel cumple con los criterios legales para ser acusado de genocidio en Gaza.
Además, esta semana EE.UU. retiró el visado al presidente palestino Mahmoud Abbas y a más de 80 autoridades palestinas, en vísperas de la Asamblea General de la ONU.