El estado de Colorado se convirtió en el vigésimo segundo (22) estado de Estados Unidos en abolir la pena de muerte.
Este lunes, el gobernador Jared Polis promulgó la ley que rechaza la pena capital y conmutó a cadena perpetua las sentencias de tres hombres que esperaban en el corredor de la muerte.
La conmutación de las penas "de estos individuos despreciables y culpables son consistentes con la abolición de la pena de muerte en el estado de Colorado, y consistentes con el reconocimiento de que la pena capital no puede ser, y nunca ha sido, administrada en forma equitativa en el estado de Colorado", dijo Polis.
El proyecto de abolición de la pena capital fue aprobado por los legisladores de Colorado en febrero, superando la oposición de los republicanos.
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"La decisión de conmutar estas sentencias se hizo para reflejar cómo es la ley de Colorado, y se hizo tras un exhaustivo proceso de acercamiento con las víctimas y sus familias", dijo Polis en un comunicado.
La abolición fue criticada por el fiscal de distrito George Brauchler, quien a través de un comunicado dijo que hay unos pocos en Colorado que celebran salvar la vida de asesinos a sangre fría.