Las autoridades sanitarias griegas han detectado los cuatro primeros casos de la cepa británica del coronavirus durante el control de dos vuelos procedentes del Reino Unido, informan los medios locales.
Las cuatro personas, todas menores de 30 años, llegaron a Atenas los pasados 21 y 22 de diciembre, y dieron positivo en un test rápido de antígenos en el aeropuerto, en el que también se detectaron dos casos del coronavirus no mutado.
En las pruebas moleculares que se realizaron a continuación, y cuyos resultados tan solo se conocieron varios días después, se halló que cuatro de los seis casos portaba la nueva cepa más contagiosa.
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Los pasajeros han sido puestos en cuarentena de 10 días en un hotel y al final de ese periodo se les realizará una nueva prueba, de cuyo resultado dependerá si podrán salir o no.
Según señalaron fuentes sanitarias a los medios, los restantes pasajeros de ambos vuelos están bajo vigilancia epidemiológica, sin que hasta el momento se hayan detectado contagios.