Fallece a los 88 años el juez más amable del mundo, Frank Caprio

La partida de Frank Caprio, el juez más amable del mundo, deja un vacío en la comunidad jurídica. Su legado de humanidad y justicia perdurará en el tiempo

¿QUIÉN ERA?

El juez Frank Caprio, conocido mundialmente como "el juez más amable del mundo", falleció este jueves a los 88 años debido a un cáncer de páncreas, informaron sus familiares a través de redes sociales.

Su legado como jurista y su carácter humano dejaron una profunda huella en miles de personas, no solo en Rhode Island, sino alrededor del mundo.

Añadieron.

Caprio alcanzó fama internacional gracias al programa de televisión Caught in Providence, emitido entre 2018 y 2020, donde se destacó por su trato justo y humano hacia los ciudadanos que enfrentaban multas de tránsito y otras sanciones menores.

Su enfoque empático y su capacidad para conectar con los demás le valieron el cariño de millones, ganando múltiples nominaciones al Emmy y seguidores en plataformas digitales como TikTok e Instagram.

El gobernador de Rhode Island, Dan McKee, expresó su pesar por la pérdida del juez:

McKee también ordenó que las banderas de todas las oficinas estatales se colocaran a media asta en homenaje a Caprio.

Frank Caprio nació en 1936 y dedicó gran parte de su vida al servicio público como juez en Providence. Su enfoque en la justicia con compasión, a menudo perdonando multas a personas que pasaban por dificultades económicas o personales, le ganó un reconocimiento único y su famoso apodo.

  • Las grabaciones de sus sentencias, compartidas en redes sociales, alcanzaron millones de reproducciones, mostrando la humanidad detrás del sistema judicial

Además de su trabajo en la corte, Caprio se destacó como mentor y guía para jóvenes abogados y ciudadanos, fomentando la empatía, la paciencia y la justicia con un enfoque humanista.

Se retiró en 2023, coincidiendo con el diagnóstico de su enfermedad, dejando un vacío en la comunidad jurídica y en el corazón de quienes lo admiraban.

Hoy, la memoria de Frank Caprio sigue viva en la televisión, internet y en la inspiración que dejó para nuevas generaciones: un ejemplo de cómo la justicia y la humanidad pueden ir de la mano, recordando que un juez puede ser tanto autoridad como un faro de bondad.