Aunque se tenga la creencia de que los atletas profesionales tienen abultadas cuentas bancarias, en ocasiones los ingresos no son suficientes para llevar una vida cómoda. Es el caso de Maximiliano Javier Almandoz, campeón argentino de taekwondo, que puso en venta su riñón en aras de celebrar los 15 años de su hija.
“Si ella es feliz, yo soy feliz. Tiene 14 años y el sueño de toda chica es la fiesta de los 15. Pensé en vender el coche, trabajé lo más que pude, jugué a la lotería, pero ves que igual no llegas para una buena fiesta. Hablamos de mucha plata, 300 mil pesos (unos 17 mil dólares)”, contó en entrevista el afligido padre.
"Trabajo 17 horas por día, de lunes a lunes, no tengo alternativa”, añadió Almandoz, quien percibe un ingreso mensual de 800 dólares, aproximadamente 15 mil pesos mexicanos. Esto a pesar de que ganó dos medallas de oro representando a Argentina y una de plata a nivel nacional.
"Si salva una vida y puede darle el festejo a mi hija, es un negocio redondo. Dicen que se puede vivir con un solo riñón”, continúa el deportista. Sin embargo, no sabe que el artículo 27 de la ley argentina 24.193 le prohibe vender sus órganos, al menos en el mercado legal.
Pero Maximiliano sentencia esperanzado: “Vendo mi riñón, tengo plata, le hago la re fiesta a mi hija, ella es feliz y no se va a olvidar nunca de ese día”.