Estos hechos han llevado a los servicios técnicos veterinarios del Institut de l’Esport Hípic de Mallorca a colaborar para esclarecer lo sucedido, junto con las diligencias abiertas por parte de la Federación Balear de Trot.
Una vez que la federación haya recabado todos los datos suficientes, será remitida la información a la unidad del Seprona de la Guardia Civil, además de llevar a término las acciones federativas oportunas. La FBT se encargara si se abre una causa contra Mestre.
La Asociación Animalista de Baleares (Assaib) y el partido político Progreso en Verde, han exigido a las autoridades, en su denuncia de los hechos, que inhabiliten a Miquel Mestre, puesto que además posee causas de dopaje en Francia y una multa de 60.000 euros, así como también solicita a las autoridades su inhabilitación total de tener cualquier animal y prohibirle la entrada a cualquier hipódromo.
Miquel Mestre se defendió ayer de las acusaciones. «Una vez celebrado el triunfo con amigos y familiares, como a todos los deportistas le dimos electrolitos. Después limpiamos la botella de cava tras la celebración del triunfo, y lo que le dimos era electrolitos y aminoácidos con agua; y la yegua no está ni atada ni obligada», explicó en declaraciones a IB3 Ràdio el cuidador de Helen Llinaritx, que añadió en su defensa sobre los hechos de los que se le acusa: «Todo es debido a una venganza de tres o cuatro personas sobre mí porque soy mal visto por ellos, me han hecho una persecución».