Desde la geopolítica

Recuento de la XVII Cumbre de los BRICS (II)

Uno de los temas centrales de la declaración final de la Cumbre Anual del grupo BRICS  (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), celebrada hace una semana en Río de Janeiro,  fue la necesidad de una reforma urgente al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. En el punto 6 del documento, los BRICS respaldaron la inclusión de más países en desarrollo como miembros permanentes, incluyendo a Brasil e India. Además, respaldaron el Consenso de Ezulwini, una posición africana que exige al menos dos asientos permanentes con derecho a veto para el continente, los cuales serían seleccionados por la Unión Africana. Esta demanda refleja el reclamo de mayor equidad en la gobernanza global, donde África sigue estando subrepresentada, en una arquitectura internacional que no fue diseñada para ella.

En cuanto al conflicto en Ucrania, los BRICS hicieron un llamado al cese al fuego y a la resolución del conflicto mediante la vía diplomática. Respaldaron iniciativas como la propuesta de paz de varios países africanos y el Grupo de Amigos por la Paz, y calificaron como actos terroristas los recientes ataques ucranianos en las regiones rusas de Briansk, Kursk y Vorónezh.  Sobre Palestina, en el punto 27, la declaración fue contundente: se exigió el respeto al derecho internacional, se condenaron las violaciones al derecho humanitario y se reiteró el apoyo a la solución de dos Estados, con base en las fronteras de 1967, lo que implicaría reconocer a Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental como parte integral del futuro Estado palestino.

También criticaron al sistema financiero global. Aprovechando el 80 aniversario de las instituciones de Bretton Woods (el FMI y el Banco Mundial) el grupo subrayó la necesidad de una reforma profunda que permita mayor representatividad de los países del Sur Global. En palabras más simples: quieren dejar de ser meros receptores de políticas impuestas y pasar a tener voz y voto en las reglas del juego económico internacional. Otro punto clave fue la defensa explícita de Irán, país miembro desde 2024. En el punto 21, se condenaron los ataques en su contra ocurridos desde el 13 de junio y se calificaron como una violación al derecho internacional y a la Carta de las Naciones Unidas

En suma, la Cumbre de los BRICS celebrada en Brasil deja un mensaje claro: el Sur Global está dejando de ser una periferia obediente para convertirse en protagonista activo de la política internacional. Los BRICS ya no son solo un grupo de países con economías grandes, son un proyecto político en construcción, con una visión del mundo donde la multipolaridad, la cooperación y la soberanía tienen un valor estratégico. Lo que está en juego no es solo la distribución del poder global, sino la posibilidad de imaginar un sistema internacional más justo, plural y representativo. (Fin)