La limpieza se ha tornado difícil, la pandemia vino a recrudecer o a frenar el ímpetu de la escoba, pues el barrido de las escaleras -de arriba para abajo- ha tenido sus contratiempos inducidos y “naturales”. Aunque el mandatario nacional arguya que él tiene otros datos, la medición a ras de tierra que el INEGI tomo como parámetro para lanzar sus resultados, da cuenta de que urge que la escoba llegue a la par también a los escalones de abajo, porque aunque se diga hasta el cansancio que el pueblo es bueno y sabio, es precisamente a los buenos de ese segmento a quienes hay que escuchar, ya que es una cotidianidad escuchar que en el rubro de procuración de justicia la mayor de las veces hay que dar una “mordida” para que el asunto camine y el ciudadano pueda ver avances en su denuncia, o para aligerar una perorata y vueltas frustrantes para realizar un trámite ante una instancia pública.
La 4T llego con el apoyo popular precisamente recargado en el anhelo de terminar con la corrupción, de terminar con los privilegios e influyentismo, fue pues el postulado mas solido de la propuesta de cambio que AMLO desplegó por años a lo largo y ancho del territorio nacional, prometió poner orden y control para así distribuir equitativamente y sin pellizcos la riqueza nacional, sin embargo en su caminar como gobierno, la 4T no ha estado exenta de señalamientos, acusaciones y sospechas en el sentido de que ese cáncer dañino quiere germinar entre sus filias, por ello casos como el cese ya hace meses del tapatío Carlos Lomelí quien se dijo “aprovechaba” su posición de super delegado para acceder a contratos jugosísimos, o más recientemente el aún no control del sistema nacional de aduanas -¡ya van por el tercer titular¡- que en palabras del mandatario nacional, califico como un “monstruo de cien cabezas”, casos pues que han levantado polémica y que se mantienen en la línea de acusaciones por corrupción o por intentonas de subsistencia de esas lacras de la política, ¿recuerdan la carta del mandatario?
A todos esos frentes ha tenido que poner pecho el presidente de la Republica, quien fiel a sus estilo en momentos de crisis engrandece su figura y toma el control absoluto del escenario -también debe decirse que el tepetiteco se agiganta y su gabinete, los legisladores, gobernadores y presidentes municipales que llegaron al puesto como parte del mismo movimiento de regeneración nacional, se achican, se agazapan e incluso hasta desaparecen o aprovechan la rebatinga para intentar hacer triquiñuelas- y se ha convertido en una especie de todólogo, que lo mismo un día despliega la necesidad de un nuevo indicador que mida el bienestar y destierre al PIB, u otro día habla de la pertinencia de una adecuada y sana alimentación, o aborda temas energéticos, económicos, ambientales, jurisdiccionales, o se enfrenta y contrasta con su derecho de réplica, la línea editorial de una prensa que a veces pareciera que ante la ausencia de oposición sensata, toma el verdadero papel de antagonismo al poder. En esa polvareda es donde tiene que desplegar la escoba el inquilino de Palacio Nacional.
En el plano local , el gobernador de Tabasco ha sido frontal en todo lo que tiene que ver con denunciar o deslizar que algún funcionario esta haciendo mal su trabajo o esta tentado en busca de algún “cochupo”, sin embargo tampoco se ha estado exento de las acusaciones, allí esta el caso de Mayra Jacobo que aún no tiene una definición clara, o ahora el tema del momento que representa la caída de Asunción Silvan, quien en una serie de torpezas se puso en bandeja de plata para que la escoba inquisitiva la barriera de tajo. Ya en el debate público se espera que el asunto no quede en el grosero cese, sino se indague hasta sus ultimas consecuencias y de comprobarse fehacientemente el desfalco de 32 millones en la hacienda municipal, se castigue a los corruptos con todo el peso de la ley. No se descarte que en tiempos en que el escozor ciudadano es una realidad, la 4T como una medida de recuperación, intensifique el barrido y la escoba arrincone a varios mañosos…
Zarpazo. Nos cuentan que el “mini” cerebro oriundo de Tapijulapa Gabriel Paz que mal asesoró a la Chona de Jalapa, se le ha visto ir y venir sobre la avenida 16 de septiembre en Villahermosa, ¿será acaso que anda en busca del perdón tricolor, para no quedarse como el perro de las dos tortas o será que cumplió con la instrucción de acabar con la administración municipal?.