Las “tres patas” de la silla del presidente

Mario Delgado ya sabe que tiene que atender a lo que le recomiende el titular de Gobernación y amigo

Al margen de los rifirrafes políticos naturales de toda confrontación entre partidos, el presidente AMLO sabe que las elecciones del año 24 las ganará si presenta buenos resultados económicos que mantengan la apabullante preferencia de los ciudadanos por su forma de gobernar, cercana y popular, que no populista, en su forma de ver. Se ha demostrado que en plena pandemia el electorado no quiso hacer cambios dramáticos en su forma de gobierno, pero lo que espera que qué este resuelva la recuperación rápidamente. La apuesta del Presidente parece ser evitar los desgastes blindando el gobierno político con Adán Augusto López al frente de la secretaría de Gobernación convertida en una especie de Vicepresidencia todo poderosa que aglutine a los que ha elegido finalmente como socios parlamentarios inevitables: El PRI y otros partidos pequeños y si se puede hasta el propio PAN en algunos aspectos, quedando casi descartado el pactar con el perredismo ninguna o muy pocas leyes. Parece que esto va funcionando y en este sentido se deben de entender las invitaciones del Presidente a gobernadores salientes que provienen del priismo a colaborar con él en diferentes posiciones del gobierno. En este camino Adán Augusto López tiene también la tarea primordial de evitar confrontaciones internas en MORENA, que tanto castiga el electorado. Mario Delgado ya sabe que tiene que atender a lo que le recomiende el titular de Gobernación y amigo, del que no olvida que fue el primero en apoyar su candidatura a la presidencia de MORENA y en Tabasco. Y la Gobernanza la amarra el Presidente AMLO con el otro “Vicepresidente” y secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O enfocando y conduciendo la recuperación económica que debe de ser “Justa”. Este concepto es fundamental: No solo se mantienen los apoyos sociales sino que la idea es que los pequeños y medianos empresarios vean la luz, a la par que la patronal y los titulares y accionistas de las grandes empresas nacionales y multinacionales. Todo comenzará con el salario mínimo, que aumentará próximamente satisfaciendo a uno de los sectores sociales más castigados; Los Trabajadores. Las grandes inversiones no ha parado de hacerse y la inversión extranjera, aun y con las restricciones propias de una economía de pandemia, no han dejado de llegar y de desarrollarse sólidamente. En el final del mandato de AMLO llegarán las terminaciones de obras y las inauguraciones de su hoja de ruta que seguramente proporcionarán aún más apoyo si cabe a la figura del tabasqueño. Y la tercera pata de la segunda parte de la Presidencia de AMLO es la de las Relaciones Exteriores que acaba de ser colocada con el anuncio de que el Presidente cubano Díaz Canel, será el invitado especial en estas celebraciones patrias. Este movimiento es toda una declaración de intenciones del gobierno de México, y de su primer mandatario, que seguramente tendrá consecuencias entre los países de nuestro entorno, principalmente entre los halcones que gobiernan en Estados Unidos a los que seguramente no les agradará mucho. Esperemos que esto no desemboque en un fuego cruzado entre los que finalmente son socios en el popularmente llamada “Tratado de Libre Comercio” con USA y Canadá. Lo cierto es que los pronósticos de los próximos tres años no son malos a pesar de que la pandemia sigue presente y no parece remitir. Los datos permiten el optimismo y el sentido común lo recomienda.