Cada ciclo sexenal que de elecciones generales mexicanas en el ámbito federal, igual que las intermedias entrañan un alto grado de complejidades. Sin embargo, la renovación de 17 gubernaturas que se tendrán para 2027 implica un punto de inflexión que nada sencillo será solventar en unas votaciones extendidas a las demás entidades locales, en las que además de manera general se renovarán alcaldías y/o congresos legislativos; sumada la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión.
El que más de la mitad de los entidades locales elijan a sus gobernantes ejecutivos anticiparía una importante participación ciudadana, siempre y cuando haya una coordinada organización por parte del INE y los organismos estatales a los que reglamenta. Tendrán igual mucho que ver los perfiles de candidaturas porr postular entre cada uno de los partidos políticos y/o coaliciones.
Aunque la anárquica situación de seguridad en donde los poderes fácticos delincuenciales dominan la plaza será a considerar un factor de mucho peso, con la infiltración incida dentro de los procesos internos de los jugadores para inclinar la balanza en pro y/o en contra de uno u otro aspirante, así como inocultable se tiene evidencia de la estructura de control para persuadir el sentido de la voluntad popular o bien inhibir la concurrencia de los electores con el sentido del voto acorde a sus intereses.
El código rojo en gran parte del país debe ser motivo para que INE, organismos locales y el gabinete de seguridad del Gobierno de la República procedan a definir un plan estratégico, habida cuenta que de manera puntual encararán el peligro de perder la vida por unas cuantas balas contra su humanidad.
En Maravatío, Michoacán, no se olvida el 27 de febrero de 2024 cuando e diferencias de horas fueron ejecutados Miguel Ángel Zavala Reyes, aspirante de Morena, y Armando Pérez Luna, del PAN; el 1 de abril tuvo un mismo destino Gisela Gaytán, candidata de Morena a la alcaldía de Celaya, Guanajuato; en total se estimaron 37 ejecuciones y antes en 2021 se consignaron 35, sin desdén alguno de otras manifestaciones de violencia que incluyó amenazas, intimidación, agresiones y daños a la propiedad. Casos federales hasta ahora se mantienen en cero.
En la complejidad de los tiempos y circunstancias, hay elecciones locales para gubernaturas que por la anarquía de una nula garantía entrampan la labor de hacer campañas y en paralelo promover el voto; la jornada de votaciones que igual está en vilo.
La tierra caliente posee sus singularidades, con puntualidad Guerrero en donde el alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue asesinado en octubre de 2024, apenas seis días después de haber tomado posesión de su cargo. Allí pretende postularse el senador Félix Salgado Macedonio, con una cuestionable reputación, aun cuando Morena por acuerdo prohibido casos de nepotismo al ser su hija Evelin la actual gobernadora; caso contrario de Rubén Morón en Michoacán, que vuelve a levantar la mano, pero el actual ejecutivo Alfredo Ramírez Bedolla le cerrará el paso al optar al apoyar a quien resulte ser de Acción Nacional.
Sinaloa, rehén de una confrontación entre un dividido cártel de drogas que por mucho tiempo dominó gran parte del territorio nacional; súmele Tamaulipas, Colima, San Luis Potosí, Morelos, complementan el combo con máxima alarmas entre las entidades en vías de renovar gubernaturas.
Las elecciones intermedias de junio de 2027 para renovar cargos ejecutivos y legislativos de gobernanza acentúan el caos, al tenerse en cuenta al Poder Judicial Federal, que de igual manera designarán por voto popular alrededor de 1 mil cargos entre magistraturas y jueces; una complicación añadida dada que literal los nombres y apellidos son anónimos para generalidad, en la eventualidad de sumarse a la participación ciudadana. En 2025 sólo un 13 por ciento del listado nominal acudió a las urnas. Situación que puede jugar en contra.
El prospectivo panorama de muchos oscuros y pocos claros debe representarle una profunda reflexión y análisis a quienes están a cargo de la reforma electoral, para que en la lógica debe encausarse hacia la progresividad, no al retroceso y menos mantener la esencia planteada desde que el diputado Sergio Gutiérrez Luna presentó su iniciativa en marzo de 2019, autodenominada de la austeridad democrática.
Sería un error desaparecer, como se pretende a los organismos electorales locales de cara al 2027, en medio de la turbiedad como común denominador entre el mosaicos de demasiados negativos planteados. No se puede negar una realidad palpable a los ojos de la ciudadanía cada vez temerosa de su integridad, con mucha zozobra.
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