LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN
La presidenta Claudia Sheinbaum atribuyó la recuperación histórica del salario mínimo y la creación masiva de empleos formales al cambio de modelo económico impulsado por la Cuarta Transformación (4T), que prioriza la lucha contra la corrupción y una redistribución más justa del ingreso.
- Durante su mensaje, Sheinbaum mostró una gráfica con la evolución del salario mínimo en los últimos 30 años, explicando que México tuvo décadas de caída salarial.
Recordó que el salario mínimo alcanzó su nivel más alto en 1977, antes de desplomarse durante el sexenio de José López Portillo tras la crisis petrolera, y que esta caída continuó con Miguel de la Madrid, periodo en que la inflación superó el 100%.
- Y posteriormente con Carlos Salinas de Gortari, perdiendo valor de manera constante.
Sheinbaum señaló que la crisis de 1994 impidió cualquier recuperación salarial significativa que se mantuvo hasta la llegada de Andrés Manuel López Obrador, cuando se inició una política de incrementos anuales por encima de la inflación para revertir esa tendencia.
Sheinbaum anunció que a partir del 1 de enero de 2026 el salario mínimo general aumentará un 13%, pasando de 278.80 a 315.04 pesos diarios, equivalentes a 9,582 pesos mensuales. Además, anunció el inicio del proceso de reducción gradual de la jornada laboral a 40 horas semanales, un acuerdo logrado entre sectores empresarial y laboral.
La presidenta contrastó esta política con los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quienes sostuvieron incrementos salariales menores con la justificación de evitar presiones inflacionarias.
Recordó que el sexenio de Calderón fue el periodo con el menor crecimiento real del salario mínimo en el siglo, con un aumento total de apenas 12 pesos de 2006 a 2012.
Con Fox el incremento fue de ocho pesos, y aunque Peña Nieto registró un avance mayor, no fue suficiente para revertir la caída acumulada.
Este cambio económico y laboral representa un avance significativo en la política social mexicana hacia salarios dignos y empleo formal de calidad.