No obstante, algunos medios locales anunciaron que se trataba de 19 niños los que habían fallecido, de edades comprendidas entre los cinco y los 12 años, así como tres adultos.
Se informó que el accidente sucedió en el área de Pongola, cerca de la frontera con Esuatini. Las carreteras de Sudáfrica están entre las más desarrolladas del continente, sin embargo, la seguridad continúa siendo un problema, y la mayoría de accidentes se atribuyen a la conducción imprudente.
El ministro regional de transporte, Sipho Hlomuka, manifestó su tristeza por el accidente que cobró la vida de al menos 16 niños.
Los servicios de emergencia arribaron al lugar de los hechos y realizaron trabajos para extraer los cuerpos luego de que los vehículos sufrieron el choque.