El consumo de fármacos para reducir peso y querer lucir una mejor figura en las próximas vacaciones de Semana Santa, puede ocasionar efectos secundarios negativos e irreversibles, como el incremento de colesterol y triglicéridos y en casos más severos, tromboembolias e infartos, advirtió la Secretaría de Salud.
En este sentido pidió a la población evitar la automedicación de este tipo de productos, debido a que son prescritas después de una evaluación médica y bajo un estricto control, alimentación sana y ejercicio.
Los medicamentos que se deben de consumir bajo prescripción médica, sólo funcionan en perdonas sin antecedentes de enfermedades hereditarias o crónico degenerativas, debido a los efectos que pueden causar, en un paciente con prediabetes puede desencadenar la diabetes.
También existen fármacos que actúan al nivel del sistema nervioso central y en enfermos con algún problema en el corazón, les provoca taquicardia e infartos.
En otros casos eleva a niveles muy altos la presión, trastornos en el sueño o provocan ansiedad, debido a que actúan a nivel del sistema nervioso central para tratar de inhibir la sensación del hambre, por lo que alteran otras funciones.
Recomendó que antes de iniciar una dieta, se debe de acudir con un especialista en nutrición, quien valorará sus antecedentes familiares y le dará un régimen alimenticio de cuerdo a su peso y estatura.
Con 15 días de alimentación sana, consumo de agua y ejercicio moderado se puede trabajar el exceso de peso y también es el más efectivo para desintoxicar el cuerpo y evitar la acumulación de sobre peso que se manifiesta con cansancio crónico.
La dependencia precisó que no es necesario gastar en programas de desintoxicación o productos que se ofrecen para eliminar el sobre peso ya que solo basta comer variado y sano, hacer ejercicio de bajo impacto y tomar agua para obtener resultados.