La psicóloga María Beulo Carrillo platicó para Sistema Informativo Tabasco indicando que médicamente las personas que realizan alguna actividad de delito sexual, como pederastas, violación, acoso o abuso sexual, entre otras, pueden ser pacientes de trastornos de comportamiento impulsivo.
Explicó que esto se puede detectar en personas que son impulsivas, violentas, comparten acciones sociales negativas o sexuales agresivas o de falta de respeto, entre otras, además de que se deben realizar estudios para saber si realmente padecen un trastorno de salud mental o solo actuaron por impulso en el delito.
“No todos los atacantes sexuales, tienen algún trastorno, sino también pudieran actuar por conducta social o educación, lamentablemente la cultura del mexicano es de poco educación sexual y machismo”, dijo.
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Precisó que también los menores de edad, desde casa deben de tener educación sexual y llamar las partes del cuerpo por su nombre, así se prevé a que surja un futuro agresor y que los agredidos sepan defenderse y detectar posibles agresiones.
“Cuando un agresor comete el acto, requiere de una intervención disciplinaria, legal, psicológica, social y psiquiátrica, dado que hay que definir si actuó por algún problema de salud mental o solo por impulso”, indicó.