Con gran fe y devoción se llevó a cabo la tradicional enrama en honor a San Marcos evangelista, donde los feligreses llevaron sus ofrendas mediante una caminata, mismas que fueron bendecidas por los sacerdotes.
La caminata fue encabezada por el sacerdote Roberto de la Cruz, seguido de un remolque del Sindicado de la H. Sección 50 que dirige Gustavo Guerra Espinosa, quien donó dos novillonas, en tanto cientos de trabajadores y trabajadoras en sus vehículos aportaron artículos de limpieza, frutas y verduras.
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Además cada ermita llevaba su ofrenda de artículos diversos, comercios como una ferretería que donó una novillona, otra un cerdo y borrego los cuales fueron puestos a la venta a bajo precio.