Más de 260 transportistas, especialmente los taxistas, no han logrado pasar el antidoping que aplica la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), ya que han detectado que consumen cocaína y marihuana, según reportó la dependencia a través de solicitudes de información.
Por esta razón han sido destituidos de su cargo, pues uno de los requisitos que se solicitan para prestar un servicio en el transporte público es comprobar que se cuenta con las mejores condiciones de salud física y psicológica.
Sin embargo, las unidades “pirata” que circulan en Villahermosa no son reguladas por ninguna autoridad, es decir, más de 100 choferes trabajan en taxis sin comprobar que evitan el uso de drogas mientras laboran.
Desde el 2015, más de 17 mil choferes han presentado esta prueba, a fin de lograr obtener los documentos que la dependencia solicita a quienes buscan laborar en taxis, combis, Transbus o autobús.
El titular de la SCT, Agustín Silva Vidal, informó recientemente que los conductores que no logran superar la prueba son remitidos a la Secretaría de Salud para dar seguimiento de los casos en el Centro de Rehabilitación de Adicciones.