El gobernador de Lugansk, Sergii Gaidai, anunció que un ataque del ejército ruso logro impactar un tanque de ácido nítrico en una planta química de Severodonetsk, al este del país. 

De acuerdo con Gaidai, el ataque aéreo de las fuerzas rusas impactó contra una planta química y agregó, que inhalar el ácido nítrico es peligroso ya que puede provocar lesiones en los pulmones o pérdida de la visión. Por ello instó a proteger a los refugiados. 

También recomendó a los habitantes de la ciudad que utilicen máscaras de protección. Según dirigentes secesionistas prorrusos, el tanque explotó en una zona controlada por fuerzas ucranianas. 

"En la planta química de Azot, un tanque con productos químicos voló por los aires. En principio, se trata de ácido nítrico", dijo en Telegram Rodion Mironchik, dirigente kide la autoproclamada república de Lugansk. 

Cabe mencionar que las autoridades locales ucranianas informaron que el ejército ruso controla la mayor parte de Severodonetsk, la última ciudad importante de la región de Lugansk que no se encuentra bajo control de Moscú. 

Con este anuncio, se confirma que el ejército ruso avanza en su objetivo de hacerse con el control de Severodonetsk. 

Pese a una situación cada vez más complicada para las tropas ucranianas, "nuestros soldados no están rodeados", dijo el gobernador. 

"Todas las infraestructuras críticas están totalmente destruida y el 60 por ciento del parque de viviendas no podrá ser restaurado", lamentó Gaidai. 

Por su parte el Consejo Noruego para los Refugiados aseguró el martes que podían quedar unos 12 mil civiles en esta ciudad industrial, que tenía unos 100 mil habitantes antes de la guerra. 

Hay que destacar que en el frente judicial, la justicia ucraniana identificó a 15 mil casos de crímenes de guerra en la región del Donbás, afirmó la fiscal general ucraniana, Iryna Venediktova, en La Haya.