Unas 55 mil belugas migran de aguas árticas hacia la bahía de Hudson, en Canadá, cada año durante el verano, debido a que este sitio les permite dar a luz en aguas relativamente más calientes y seguras. 

Bajo la superficie, las belugas se divierten con la presencia de los turistas que vienen a Churchill para observarlas. 

Entre noviembre y junio, toda la bahía está congelada, lo que es ideal para ellos: los protege de las orcas y los estuarios son ricos en alimento. 

¿Cómo se comunican las belugas?

Bajo la superficie siempre parecen estar sonriendo, pero lo que más sorprende es su comunicación a través de silbidos y casi 50 vocalizaciones. 

Los recién nacidos, que miden 1.80 metros y pesan 80 kilos, dependen de su madre durante dos años. A la edad adulta, este mamífero puede alcanzar hasta seis metros y vive entre 40 y 60 años. 

La población de belugas en la bahía de Hudson es la más importante del mundo, pero la disminución de glaciares debido al cambio climático preocupa a los investigadores.