Espeluznante es la historia de terror, que se asemeja a las contadas en otras partes de Villahermosa. pero esta es de ‘la niña del vestido azul del panteón de Palomares’ y situación horripilante en la que casi siempre participan niños, como la que cuenta don Raúl Francisco, sepulturero del camposanto.

APARICIÓN

• “Vino una vecina mía junto con su nieto, llegaron a forrar una bóveda donde tiene enterrado a su marido, pero resulta que el niño se fue a jugar al fondo de la barda, no habían pasado ni 10 minutos cuando regresó hecho un papel, blanco del susto, dice que vio a la niña que le hablaba, comenta el panteonero mientras se rasca la cabeza al recordar aquella macabra anécdota.

Es el breve relato de quien trabaja junto a los muertos en el cementerio del Sector Palomares de la colonia Las Gaviotas Norte, asegura don Raúl que en los pasillos se escuchan ruidos, y por estas fechas empieza aparecerse la niña del vestido azul.

“Parece como de 10 años y siempre te llama con los brazos extendidos, pobre de aquel que se acerque a ella, es la mera muerte” comentan algunos que confirman la versión del sepulturero.

La han visto dentro y fuera del panteón, camina cerca de la barda siempre jugando, buscando algún descuidado que la acompa ñe al más allá. Para estas fechas, es más común que aparezca, por lo que muchas personas oriundas del lugar y que conocen la historia procuran no transitar por la zona y mucho menos de noche.