En redes sociales se viralizó un video de un joven que salió a las calles de la Ciudad de México con una charola de panes para repartirle a las personas que se encontraban afuera de sus casas luego del terremoto de 7.7  grados que tuvo epicentro en Coalcomán, Michoacán. 

El video fue compartido en Twitter por el usuario @rooymunguia y ya acumula más de 773 mil reproducciones, así como 52 mil me gusta. Varios usuarios lo han felicitado por su solidaridad y han destacado que pese a las diferencias de opiniones en los momentos que se necesitan los mexicanos siempre están para apoyarse. 

"No es surreal, es el verdadero México, nos damos la mano en los momentos más difíciles, sin siquiera conocernos". "¿En qué otro país del mundo la gente se preocupa por el prójimo y le da su pancito pal susto? En ninguno, viva México". "Yo diría que solidario, las acciones de los ciudadanos ante estos fenómenos son sorprendentes", comentaron.

¿Por qué se come un bolillo para el susto? 

Aunque como tal un bolillo no te cura del susto, de acuerdo con la Biblioteca de la Medicina Tradicional Mexicana al vivir un momento de tensión o angustia se incrementa la producción de jugos gástricos por lo que comer un bolillo o una tortilla fría puede ayudarte a asentar el estómago. 

Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) también han explicado en la gaceta de la institución que el comer un bolillo puede estabilizar los niveles de glucosa en la sangre, los cuales se elevan al vivir un momento de tensión, y también ayuda a contrarrestar la sensación de un hueco en el estómago, pues los carbohidratos y las grasas inhiben la producción de ácido gástrico. 

El acto de masticar también puede funcionar como un distractor y ayudar a mitigar los efectos del susto, sin embargo, en la gaceta aclaran que esto se puede conseguir con cualquier alimento y no necesariamente se tiene que comer un bolillo.