Crisis en educación especial de Coahuila

DISCRIMINACIÓN 

La educación especial en Coahuila enfrenta una crisis de confianza tras dos casos recientes de presunta negligencia, discriminación y maltrato en Centros de Atención Múltiple (CAM) de Torreón.

Ambos incidentes involucran a niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y han puesto bajo escrutinio el funcionamiento de estos planteles, dependientes de la Secretaría de Educación del Estado.

• El primer caso ocurrió en el CAM 27, ubicado en el sector Las Fuentes. Un niño de 11 años con autismo nivel tres ingirió veneno para ratas que se encontraba al alcance en el escritorio de la maestra. El incidente sucedió el primer día de clases, mientras los padres entregaban a sus hijos a la nueva docente.

La madre del menor, April Antuna, relató que ella misma retiró el veneno de la boca de su hijo, pero la respuesta del personal fue alarmante: en lugar de activar protocolos de emergencia, le dieron un litro de leche y lo enviaron a casa.

El niño fue llevado posteriormente a urgencias, donde se confirmó la intoxicación y se le realizó un lavado de estómago. La madre denunció públicamente la ausencia de protocolos, la falta de personal capacitado y la negligencia institucional.

Aunque los detalles del segundo caso no han sido revelados en su totalidad, medios locales reportan que también involucra a un menor con TEA en otro CAM de Torreón. En ambos casos, se señala una constante: la falta de supervisión institucional, protocolos de emergencia y personal especializado para atender a niños con condiciones neurodivergentes.

Estos casos han encendido las alarmas sobre el estado de la educación especial en la región. Expertos y familiares denuncian que los CAM carecen de:

• Protocolos claros de atención en emergencias médicas
• Capacitación adecuada para docentes y personal administrativo
• Supervisión efectiva por parte de autoridades educativas
• Infraestructura segura para menores con condiciones especiales

Además, organizaciones de derechos humanos han comenzado a emitir recomendaciones y exigir investigaciones formales para esclarecer responsabilidades y evitar que estos hechos se repitan.

La comunidad educativa y padres de familia han exigido una revisión profunda del sistema de educación especial en Coahuila. Se pide la implementación de protocolos de seguridad, capacitación continua para el personal y auditorías en los CAM para garantizar condiciones dignas y seguras para los menores.