Migrantes en búsqueda de empleo avanzan por el país

BUSCANDO UN RUMBO

La caravana migrante denominada "Por la libertad", que partió de Tapachula, Chiapas, el pasado 1 de octubre con aproximadamente mil personas, ingresó hoy al territorio oaxaqueño con solo 200 integrantes, tras recorrer 246 kilómetros en condiciones adversas, entre deserciones, detenciones y agotamiento físico.

• El grupo llegó al poblado Los Corazones, perteneciente al municipio de San Pedro Tapanatepec, donde fueron recibidos por organizaciones civiles y algunos vecinos que ofrecieron agua y alimentos. La caravana, integrada principalmente por personas originarias de Centroamérica, el Caribe y Sudamérica, busca avanzar hacia el norte del país con la esperanza de obtener asilo o empleo en Estados Unidos.

Durante los 17 días de caminata, los migrantes enfrentaron altas temperaturas, falta de alimentos, enfermedades respiratorias y vigilancia constante de autoridades migratorias. Muchos abandonaron el recorrido por agotamiento o fueron detenidos en retenes instalados en municipios como Huixtla, Tonalá y Arriaga.

"Salimos con esperanza, pero el camino nos ha quitado fuerza. Muchos compañeros se quedaron atrás o fueron llevados por Migración", relató María Fernanda, migrante hondureña que viaja con su hijo de 6 años.

La caravana se quedó sin su principal organizador, el activista cubano Orestes Rodríguez, quien fue detenido hace tres días en Tonalá, Chiapas, presuntamente bajo engaños por parte de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM).

Según denuncias de sus familiares, Rodríguez fue citado para una supuesta reunión de coordinación y posteriormente trasladado a una estación migratoria sin que se le permitiera comunicarse con su grupo.

La ausencia de Rodríguez ha generado desorganización y desinformación entre los migrantes, quienes ahora avanzan sin una ruta clara ni interlocutores ante las autoridades.

La caravana "Por la libertad" es una de varias movilizaciones espontáneas que han surgido en el sur de México en los últimos meses, en respuesta a la lentitud en los trámites de regularización, la falta de empleo en Tapachula y el endurecimiento de las políticas migratorias en la frontera norte.

Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), Tabasco y Chiapas registran tasas de desempleo superiores al promedio nacional, lo que ha convertido a estas entidades en zonas de tránsito más que de asentamiento para migrantes.

Organizaciones como el Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano han solicitado a las autoridades de Oaxaca que garanticen el derecho al libre tránsito, acceso a servicios básicos y protección contra detenciones arbitrarias.

Se espera que en los próximos días la caravana avance hacia Juchitán o Tehuantepec, aunque su ruta dependerá de las condiciones de seguridad y la respuesta institucional. Mientras tanto, los migrantes continúan su marcha con la esperanza de encontrar libertad, refugio y dignidad en su camino hacia el norte.