Feminicidio: el mal que se expande por toda la República.

De acuerdo con la información que recientemente desagregó el SESNSP, las mujeres víctimas de homicidio doloso pasaron de mil 755 en 2015 a 2 mil 585 en 2017.

Pero este no es un dato aislado, pues podría tratarse a decir de especialistas, de cifras que engordan aún más las estadísticas de los feminicidios del país.

Karla Michel Salas, abogada especialista en feminicidio, expuso en entrevista al medio Publímetro que de acuerdo con su experiencia muchos de los homicidios dolosos en realidad son feminicidios.

“Algo que podría ayudar a darle una interpretación mucho más concreta y certera a los datos, es que en los homicidios dolosos de mujeres se identificara al sujeto activo. Porque si son personas desconocidas sí podríamos decir: ‘ah, pueden estar vinculadas estas muertes dentro de la violencia generalizada que se vive en el país’, pero si las personas eran cercanas a la víctimas, podemos dar otros elementos”.

“Otro elemento, son las características de cómo se dio ese homicidio doloso, si fue con una arma de fuego, si fue de uso exclusivo del Ejército o por ejemplo, si fueron asfixiadas, golpeadas o hubo violencia sexual”, explicó.

Sin embargo, puntualizó, el tema de fondo es que la violencia que sufren las niñas y las mujeres del país no solamente es fuera del hogar, sino también al interior, lo que significa, dijo, que no hay ningún sitio seguro para las mujeres.

David Ramírez-de-Garay, coordinador del programa en seguridad de México Evalúa coincidió respecto a que el registro de feminicidios en el país padece de un subreporte, es decir, muchos feminicidios son registrados como homicidios dolosos.

“No todos los feminicidios que se están reportando son los feminicidios que están pasando. Por ejemplo, en Sinaloa viene –en el reporte dado por el Secretariado– con tasas de cero  en homicidios dolosos, pero no porque no existan, sino que ellos clasifican todos los homicidios de mujeres como feminicidios”, detalló.

Código Penal homologado

Por ello señaló que es necesario que todas las entidades del país cuenten con un Código Penal homologado para que los datos sean más puntuales. En tanto, Michel Salas explicó que la incorporación del feminicidio ha sido gradual como en el caso de Chihuahua, donde apenas en octubre de 2017 se tipificó dicho delito.

“Entonces en estas cifras Chihuahua ocupa los últimos lugares, sólo con 11 feminicidios, pero en los homicidios dolosos aparece en los primeros lugares con 212”, comentó.

Además, el otro problema, dijo, es la resistencia de las autoridades a clasificar los asesinatos de mujeres como feminicidios, como sucede en la Ciudad de México, lugar donde se han documentado muchos casos que por sus características son feminicidios, pero se abren carpetas de investigación por homicidio doloso.

Mujeres en el narcotráfico

Así como pueden clasificarse  feminicidios como homicidios dolosos, también existe la posibilidad de que el aumento en los homicidios en los que las víctimas son mujeres se deba a una mayor participación en delitos relacionados con el crimen organizado, consideró Santiago Roel, director de la organización Semáforo Delictivo.

“El narcotráfico retoca a toda la sociedad. El narcomenudeo retoca familias, jóvenes y mujeres, y yo no veo por qué la mujer pueda estar exenta de ello”, respondió en entrevista.