La zona permanece acordonada para primero contener el chorro a fin de evitar una explosión que ponga en riesgo a la población.
Al momento no hay personas cercanas a la toma clandestina, como ocurrió en Tlahuelilpan hace tres años, cuando murieron más de 160 personas por robar gasolina de un enorme chorro como el que hoy se aprecia en Tetepango.
Tampoco hay personas detenidas por estos sucesos que ya están en manos de autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Te puede interesar: Kim Kardashian presenta problemas de salud tras someterse a una estricta dieta